Este 24 de enero marcó un hito importante. El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) anunció oficialmente, a través del Diario Oficial de la Federación, una medida que redefine el panorama de la salud reproductiva para sus afiliadas.
A partir de esta fecha, las clínicas del ISSSTE están obligadas a garantizar el aborto seguro y voluntario hasta las 12 semanas de gestación. Este acuerdo, fruto de un largo proceso legal y social, busca “regular aquellos casos donde se interrumpa legalmente el embarazo en el Issste, a fin de proteger la integridad personal y la autonomía reproductiva de la persona usuaria”.
El documento enfatiza la importancia de que el procedimiento, definido como Interrupción Legal del Embarazo (ILE), sea realizado por “personal de salud capacitado, que interrumpe el proceso de gestación en el periodo comprendido entre el momento de la implantación y las 12 semanas completas de gestación”. Se destaca el carácter voluntario y autónomo de la decisión, respaldado por la legislación vigente en los estados donde el aborto ha sido despenalizado.
Una clave del acuerdo radica en la protección de las usuarias en caso de ser víctimas de un delito. El procedimiento se regirá bajo la NOM-046-SSA2-2005, garantizando la atención sin revictimización. Esto es crucial considerando que 19 de los 32 estados de México ya han despenalizado el aborto antes de la semana 12, en línea con la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de hace dos años.
El ISSSTE, al implementar esta medida, se convierte en la primera institución federal en dar un paso concreto hacia la garantía de este derecho. El acuerdo establece un plazo de 30 días para actualizar la lista de unidades médicas que ofrecerán el servicio de ILE, respetando la objeción de conciencia del personal médico y asegurando la disponibilidad de personal capacitado para brindar la atención.
La implementación de este cambio implica una compleja logística y un proceso de adaptación para el sistema de salud público, representando un cambio significativo en la atención a las mujeres en México. El camino hacia la plena garantía de los derechos reproductivos continúa, con este acuerdo como un paso relevante en ese proceso.