Un incidente reciente en la avenida Pablo González "Fleteros" ilustra este contraste. El suceso ocurrió en la zona de San Jerónimo, un área sorprendentemente monitoreada por un complejo sistema de seguridad. Se reportó un fuerte impacto, seguido de escenas de pánico. Un vehículo se estrelló contra la barda de una empresa, a pocos metros de la avenida Aarón Sáenz. La magnitud del accidente llamó inmediatamente la atención de las autoridades y los transeúntes.
Dentro del automóvil, la situación era aún más grave. Se confirmó la muerte de un joven de tan solo 17 años, identificado como Antonio. Su muerte fue resultado de un ataque directo, "una ejecución" como lo señalaron algunos testigos. Lo impactante es que Antonio no estaba solo.
Acompañándolo iba su novia, quien milagrosamente resultó ilesa. El shock y el terror fueron evidentes en su reacción inmediata; huyó de la escena buscando ayuda. Su testimonio será crucial para la investigación, que se centra ahora en determinar los móviles del crimen.
La investigación se ha visto facilitada por la abundancia de cámaras de seguridad en el área. "Hasta siete cámaras, entre privadas y del C4 regio, grabaron el incidente", declaró una fuente cercana a la investigación. El análisis de estas grabaciones es fundamental para identificar a los responsables y reconstruir la cronología de los hechos. Se encontraron casquillos percutidos en la escena, evidencia que refuerza la hipótesis de un ataque a balazos.
El cierre temporal de la circulación en la lateral de la avenida Pablo González "Fleteros" provocó considerables problemas viales. Mientras tanto, la ciudad se enfrenta a la conmoción generada por un crimen que ha dejado a una comunidad en shock.