Policías jubilados de Culiacán radicalizan protestas por pagos pendientes
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La protagonista de esta historia es Yesenia Rojo Carrizoza, representante de los policías jubilados y de la agrupación Guerreros Unidos. Ella y más de 30 compañeros, incluyendo viudas de policías caídos, han intensificado sus protestas debido a una deuda pendiente: el pago de su prima de antigüedad. Este conflicto, lejos de resolverse, se ha agudizado, convirtiéndose en una demostración de la creciente tensión entre la ciudadanía y las autoridades.
Según Rojo Carrizoza, "En ese tiempo que estuvimos sin manifestarnos buscamos que cumpliera la promesa el gobernador Rocha Moya, que aunque dice con toda razón que el ayuntamiento es autónomo también sabemos que ya es un problema de violencia contra una parte de la sociedad, nadie podrá negar que Estrada Ferreiro está actuando de una manera violenta creo que ya ha rebasado límites en cuestión de derechos humanos". Las acusaciones apuntan directamente al alcalde Jesús Estrada Ferreiro y al gobernador Rubén Rocha Moya por la falta de atención a sus demandas.
La estrategia de protesta ha cambiado. Ahora, las manifestaciones se realizarán por lo menos una vez a la semana frente al ayuntamiento, y los lunes se concentrarán frente a Palacio de Gobierno durante las conferencias de prensa del gobernador. La determinación de Rojo Carrizoza es clara: "Vamos a seguir con las manifestaciones por lo menos una por semana, ahorita las estrategias que estamos siguiendo, es no separarnos si quieren detener a una persona que nos lleven a todos".
El punto central de la disputa radica en la falta de transparencia. Los policías jubilados exigen al alcalde Estrada Ferreiro que publique una lista detallada de los pagos pendientes para poder proyectar una fecha de solución. Sin embargo, la confianza en las autoridades se ha deteriorado significativamente.
El bloqueo de la avenida Álvaro Obregón, durante varias horas entre las 10:00 y las 12:00 del mediodía, es solo una muestra de la magnitud del problema y el impacto en la vida diaria de los ciudadanos de Culiacán. El tráfico vehicular se vio severamente afectado, subrayando la urgencia de encontrar una solución a esta problemática.
Más allá del cierre vial, la situación refleja un profundo descontento social y la necesidad de un diálogo efectivo entre las autoridades y los policías jubilados que reclaman lo que consideran un derecho.