Protestas 8M: Familiares exigen justicia a Claudia Sheinbaum

Pero la barrera metálica no logró silenciar el clamor de un grupo de familiares de víctimas de feminicidio y desaparición. Desde el martes 4 de marzo, previamente al 8M, se habían instalado estas estructuras, pero las familias, decididas, se congregaron en las inmediaciones del recinto presidencial. Sus rostros, marcados por el dolor y la indignación, reflejaban una lucha incansable por la justicia.
Entre las vallas, se leía con fuerza el mensaje: "Claudia, no llegamos todas. Atrévete a escucharnos". Esta frase, pintada con letras firmes sobre una de las estructuras de tres metros de altura, se convertía en el símbolo de una protesta que iba más allá de una simple manifestación.
Las familias, con siluetas de madera que representaban a sus seres queridos perdidos, y con cartulinas llenas de mensajes desgarradores, exigían una respuesta contundente de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. Como muestra de su determinación, algunas incluso se amarraron a las vallas, emprendiendo una huelga de hambre.
Más allá de las pancartas y las consignas, la situación reflejaba un profundo dolor. Su lucha no solo busca justicia, sino también la construcción de un monumento a la paz en Tehuacán, Puebla, un proyecto que simboliza su anhelo por un futuro sin violencia. Los familiares solicitan apoyo a los transeúntes, aceptando donaciones para lograr su objetivo.
La escena, cargada de simbolismo y emoción contenida, permanece como un testimonio de la perseverancia y la lucha por la memoria de quienes ya no están.