Metanfetamina, la tercera droga más consumida en Nogales

Nogales, por ser punto de entrada de la metanfetamina hacia Estados Unidos, es un municipio donde se consume dicho narcótico, a pesar de las serias afectaciones que puede causar a sus usuarios, advirtió Zulema Thome, directora del Centro de Integración Juvenil (CIJ) de Nogales.

Según datos del Departamento de Evaluación del CIJ, en esta frontera durante el 2017, los estimulantes, de los cuales forma parte la metanfetamina, fue la tercera droga ilegal más consumida entre los pacientes que se atendieron, solo por debajo de la marihuana y la cocaína.

Thome aceptó que Nogales es un punto de entrada de gran importancia para su exportación ilegal hacia Estados Unidos y que el consumo de metanfetaminas se da en México desde hace más de veinte años y en Nogales, mucha droga se queda aquí y se consume, generando serias afectaciones en la salud física y mental de la persona, así como deteriora las relaciones familiares y con amistades.

Provoca además actividades delictivas, por no ser una droga que genere relajación, si no todo lo contrario, es un estimulante y lleva a la persona a generar una gran cantidad de energía, dejando a la persona sin opción de como emplearla positivamente”, comentó.

Agregó que a nivel físico las afectaciones son aumento en la presión arterial, en la frecuencia cardiaca, en la temperatura corporal, causa dilatación en la pupila y genera además que el paciente no sepa qué hacer con esa energía, causando también paranoia, celotipia y sensación de poder que en realidad no se tiene.

Generalmente viene aparejado con otras enfermedades del orden mental, como la depresión, la ansiedad, un trastorno desafiante o posecionista en la adolescencia, genera una gran problemática económica, social, familiar y las personas, por su poder adictivo que tiene esta droga, pierden el sentido por otros elementos que en la vida les pudieran generar placer”, mencionó.

La directora del CIJ añadió que esa misma sensación placentera que genera la metanfetamina por unos minutos, hace que la persona quiera más droga y en periodos cada vez más cortos, sin que se den cuenta que son afectados seriamente en su salud física y mental.