Nogales, Son
Desde hace aproximadamente 2 meses, los vecinos de la calle Bosque Rojo de la colonia Bicentenario, han pedido la atención de las autoridades por un problema que a su consideración aumenta el riesgo de sus traslados por diferentes factores, sobre todo para niños y personas mayores, ya que una iglesia bautista, cerró con una barda el acceso de un equipamiento urbano marcado como andador.
Según el testimonio de los colonos, por más de 10 años este cruce que conduce al servicio de transporte y otras zonas, permaneció libre para ellos y hace relativamente poco tiempo, la persona encargada de estas instalaciones religiosas con razón social “Primera Iglesia Bautista de Nogales”, de la quien dijeron desconocer el nombre, optó por cerrar esta vía causando molestia entre los residentes.
María de Jesús Cabral, vecina de la calle Bosque Viejo, que colinda con este centro de fe, manifestó que se ha tratado de dialogar con el encargado del sitio, pero este no ha dado respuesta por lo que decidieron llamar a las autoridades, quienes si bien en un inicio acudieron y emitieron una orden de remoción desde el pasado 9 de mayo, esto no se ha ejecutado y la iglesia ha hecho caso omiso de esta petición oficial, a pesar de que se especifica en el documento 3 días hábiles para que se retirara dicha construcción.
“Les mandaron un citatorio, pero no contestaron, vinieron y midieron con una cinta de medir de esas de albañil, le midieron una esquina aquí, le midieron la otra esquina allá y así se fueron, es todo, necesitamos urgentemente que abran ahí”, declaró María De Jesús Cabral, vecina.
El problema poner el riesgo a los más pequeños indicó Monserrat López, quien es vecina directamente de la estructura, quien manifestó que ahora sus recorridos se han vuelto más inseguros, inclusive, esto la orilló a abrir parte de su barda de contención para poder llevar más rápido a sus hijos a la escuela.
Este cierre afecta a todos mencionó el señor Manuel Cruz, ya que en las rutas cercanas es bien sabido que se encuentran personas con malas intenciones y existe además una gran concentración de perros callejeros que ya han dejado victimas al poco tiempo de haberse cerrado, aunado a esto, la dificulta que alguien tendría por encontrar transporte en caso de una emergencia, en su caso como miembro de la tercera edad, aumentó sus traslados bajo el sol lo que ha complicado sus enfermedades.