Caborca
Las autoridades de la PGJE tienen plenamente identificado al sospechoso.
Alrededor de las 18:30 horas del pasado martes, un anciano velador de 96 años de edad, murió calcinado en el interior de su vivienda, en la colonia Salomón Quihuis, la cual fue quemada intencionalmente por un sujeto que ya fue identificado, pero que la policía no ha podido atraparlo porque huyó entre el monte, amparado por la oscuridad nocturna.
El occiso, que era muy conocido y querido por la comunidad caborquense, llevaba por nombre Benjamín Cárdenas Reyes, a quien apodaban “El Tierra Blanca” ya que era originario de Culiacán, Sinaloa, pero tenía viviendo la mayor parte de su vida en esta ciudad.
Este delito fue clasificado como homicidio y daños por incendio, mismo que causó un gran descontento entre los vecinos del lugar, porque el piromaniático homicida es vecino de la víctima, con la cual discutió momentos antes.
El parte informativo de la Policía Municipal, establece que un testigo presencial observó cuando el vil sujeto salió huyendo del lugar, mientras la casa del anciano se incendiaba.
Cuando llegaron los Bomberos, estos se abocaron a sofocar el fuego del cuarto construido de madera y láminas de cartón, pero ya era demasiado tarde y entre los restos metálicos de la cama se podía observar, a simple vista, el cuerpo totalmente calcinado.
El propietario del predio, José Manuel González, manifestó que hacía poco se acababa de retirar del lugar en compañía de sus hijos ya que horas antes le comunicaron que el presunto homicida le quería pegar a su velador y optó por regresar con él, pero se hizo tarde y se fue de nuevo a su casa, en la colonia Aviación, siendo ese ínter que aprovechó el sujeto para cometer su crimen.
Asimismo agentes de la PEI y Policía Municipal realizaron recorridos por los alrededores tratando de ubicar al presunto culpable, pero este no pudo ser localizado por el momento.
Versión PEI
Asimismo, el informe de la PEI establece que el presunto responsable de los hechos es una persona del sexo masculino, de alrededor de 50 años de edad, el cual sufre de sus facultades mentales y quien está plenamente identificado.
Los hechos ocurrieron en un cuarto de obra negra y cartón, habilitado como vivienda en dicho predio.
Un testigo de los hechos manifestó que él se percató cuando el presunto salía molesto del cuarto del hoy occiso, porque la víctima no le quiso dar un cigarro, huyendo hacia el monte a fuerza de carrera, a la vez que le lanzaba amenazas.
El testigo añadió que posteriormente se percató que del cuarto de la víctima salía humo y cuando llegó hasta la vivienda para prestarle ayuda a Benjamín, el cuarto ya estaba ardiendo, por lo que le fue imposible prestarle ayuda al hoy fallecido.
En las indagatorias realizadas por los agentes de la PEI, se logró establecer que el presunto responsable es una persona pirómana, ya que en otras ocasiones ha provocado otros incendios en los alrededores.