Incautan agentes fronterizos más de 1 mdd en drogas
El diario de Sonora
el 17/02/2018 12:00 AM, Sección Arizona
Última edición 23/04/2024 01:13 AM.
Seis personas, entre ellas tres mujeres, fueron detenidas en recientes horas por agentes federales, cuando trataban de cruzar por las garitas de Nogales, Arizona, con cargamento de narcóticos, que, en conjunto, fueron valuados en más de un millón de dólares.
De acuerdo con el reporte de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), los decomisos totalizaron más de 200 libras de metanfetaminas y cocaína.
En el primero de los casos, en la garita Dennis DeConcini detuvieron a una mujer mexicana de 33 años, con tarjeta de cruce Sentri, en posesión de 17 libras de cocaína, valuadas en 196 mil dólares y más de cinco de metanfetaminas, valoradas en 16 mil dólares, mismas que llevaba ocultas en la consola central de un pick up Chevy.
Más tarde, un joven ciudadano estadounidense de 21 años fue asegurado con catorce libras de cocaína, con valor de 154 mil dólares y que llevaba ocultas en el panel trasero de un Dodge Hatchback.
También la garita DeConcini, elementos del CBP arrestaron a un mexicano de 25 años, quien pretendía cruzar en un sedan Ford, con 17 libras de cocaína ocultadas en la consola central, cargamento valuado en casi 187 mil dólares.
Más tarde, una mujer estadounidense de 35 años fue detenida cuando quería cruzar en una camioneta GMC, en la que transportaba casi 96 libras de metanfetaminas, valuadas en 287 mil dólares, en varios compartimentos del vehículo.
Por el mismo cruce, cayó la tercera mujer, una mexicana de 23 años, quien conducía un Jeep, en el cual llevaba 51 libras de metanfetaminas, valuadas en casi 154 mil dólares, en el interior de la llanta de refacción.
Finalmente, en la garita Mariposa, un hombre de nacionalidad mexicana y de 32 años, fue arrestado con cuatro libras de metanfetaminas, valuadas en más de trece mil dólares y que llevaba ocultadas en las puertas, del pick up Ford que conducía.
En todos los decomisos, los agentes federales utilizaron perros adiestrados para la detección de narcóticos, que olfatearon exitosamente las drogas ocultas.
