La tragedia en Tubutama, Sonora, sacudió a la comunidad migrante. Un ataque a balazos contra un vehículo que transportaba a migrantes dejó un saldo lamentable, un niño del sur de México sin vida y ocho heridos, entre ellos mexicanos, ecuatorianos y africanos.
El ataque, ocurrido el domingo en un municipio a 47 millas al sur de Sasabe, Arizona, ha generado una ola de indignación y preocupación.
Las autoridades no han revelado aún el motivo del ataque, pero la zona es un punto estratégico en la ruta migratoria hacia Estados Unidos y ha sido escenario de enfrentamientos violentos entre grupos criminales que operan en el tráfico de personas.
Las autoridades han iniciado una investigación para identificar a los responsables y llevarlos ante la justicia, pero el miedo y la incertidumbre se han apoderado de la comunidad migrante. La violencia y la inseguridad son una realidad a la que se enfrentan, y la falta de protección adecuada les deja vulnerables a la acción de los criminales.