La visita de Donald Trump a la frontera entre Estados Unidos y México en Sierra Vista, Arizona, se convirtió en un espectáculo visual que contrastaba dos enfoques para la seguridad fronteriza.
El escenario elegido, un camino de tierra al pie de las colinas salpicadas de arbustos de Arizona, fue testigo de la construcción de un tramo de muro y una pila de vigas de acero, atribuidos a Trump y a Kamala Harris respectivamente. "A mi derecha está lo que llamamos el muro de Trump. Este fue un muro que se construyó durante el gobierno del presidente Trump", declaró Paul Pérez, presidente del sindicato de la Patrulla Fronteriza. "A mi izquierda, tenemos lo que llamamos el muro de Kamala. Está ahí tirado sin hacer nada", agregó.
La visita se llevó a cabo en el contexto de una serie de eventos que buscan desviar la atención de la convención demócrata en Chicago, donde se celebraba la nominación de Harris a la vicepresidencia. Los oradores de la convención acusaron a Trump de utilizar la frontera para agitar a su base y demonizar a los inmigrantes.
En el evento de Arizona, Trump estuvo acompañado por madres en duelo, al alguacil del condado Cochise y al jefe del sindicato de la Patrulla Fronteriza, quienes respaldaron su mensaje de seguridad fronteriza. Las madres de niños asesinados por inmigrantes que se encontraban en el país ilegalmente estuvieron presentes, con el objetivo de resaltar la inseguridad que, según Trump, reina en el país bajo la administración de Biden.
La visita a la frontera tuvo lugar un día después de que Trump celebrara su primer mitin al aire libre desde el intento de asesinato del mes pasado, lo que se tradujo en la presencia de francotiradores en posición elevada con los ojos y las armas apuntando hacia México. La seguridad también se vio reforzada del lado mexicano de la frontera, con presencia de hombres armados y personal de la policía estatal mexicana.
Lo que Biden y Kamala han hecho a las familias aquí conmigo y a tantas otras, miles y miles de otras, no solo las han matado, sino que también las han lastimado gravemente, las han lastimado gravemente hasta el punto en que nunca volverán a llevar una vida normal. Es vergonzoso y malvado, declaró Trump.La visita de Trump a la frontera se convirtió en una puesta en escena con un mensaje político claro: la seguridad fronteriza es una prioridad, y su enfoque es el único efectivo para garantizarla.