Un martes cualquiera en Phoenix, un incidente que puso a prueba los protocolos de seguridad del plantel. A las 12 del mediodía, un estudiante fue llevado a la oficina de administración por una infracción menor, según la policía. Sin embargo, la situación tomó un giro inesperado cuando se encontró un arma de fuego en la mochila del estudiante.
Las autoridades de la escuela actuaron rápidamente, contactando al Departamento de Policía de Phoenix. La presencia de un arma en la escuela es una violación grave de las políticas del plantel y del código penal, lo que llevó al arresto del estudiante. Aunque no se registraron heridos, el incidente generó preocupación en la comunidad escolar.
En un comunicado, la escuela aseguró que la seguridad de los estudiantes es su prioridad máxima.
Durante un incidente disciplinario menor ocurrido hoy, la administración de la escuela encontró un arma descargada en la mochila de un estudiante. De acuerdo con nuestro plan de seguridad, se llamó a la policía y se apoderó de la mochila y el arma. Cooperamos plenamente con las autoridades mientras llevaban a cabo su investigación y están tomando las medidas correspondientes en relación con el estudiante, señaló el portavoz de West Phoenix High School.
El incidente, si bien aislado, sirve como un recordatorio de la importancia de la vigilancia constante en las escuelas y la necesidad de que los estudiantes, padres y personal trabajen en conjunto para mantener un ambiente seguro. A pesar del susto, la escuela aseguró que sus protocolos de seguridad funcionaron como estaban planeados y que el campus se encuentra seguro.