Bradley, quien desapareció a mediados de agosto, fue encontrado sin vida en el desierto cerca de Gila Bend, pocos días después de que se reportara su desaparición.
Las autoridades confirmaron que Bradley fue asesinado de un disparo en la espalda y que su cuerpo fue encontrado decapitado en Arizona, detalles que han causado gran conmoción y dolor a sus familiares.
Lo que añade más tragedia a esta historia es que el principal sospechoso del asesinato es Samuel Bush, de 23 años, quien era el mejor amigo de Alijah. La familia de Bradley, todavía en shock por la pérdida, describe la relación entre ambos como muy cercana, lo que hace aún más inexplicable el acto de violencia.
La investigación comenzó cuando la madre de Alijah notó que su teléfono estaba ubicado en el apartamento de Bush, pero que este no sabía nada sobre su paradero. La familia, siguiendo un instinto maternal, rastreó el coche de Alijah y encontró que estaba en un lugar desolado del desierto, un área donde, posteriormente, se encontraron los restos del joven.
El caso, inicialmente enfocado en la desaparición de Bradley, ha tomado un giro dramático con el descubrimiento de su cuerpo y la detención de Bush, quien enfrenta cargos por asesinato en segundo grado y ocultamiento de partes del cuerpo.