Un incidente aterrador en un parque de diversiones de Phoenix ha generado preocupación sobre la seguridad de los visitantes. Un cliente de Castles N' Coasters afirma que su arnés de seguridad falló en el paseo Tormenta del Desierto, lo que podría haber tenido consecuencias fatales.
Según el cliente, que prefirió mantener su identidad en secreto, el incidente ocurrió el 24 de noviembre mientras celebraba el cumpleaños de su sobrina en el parque. "Empezamos a subir, todo parecía estar bien. Y cuando nos acercamos a la cima, escucho un clic. Diferente al clic de la montaña rusa al subir por la cadena", relató.
El cliente asegura que su arnés de seguridad se desactivó justo antes de una gran caída, lo que le permitió salir de su asiento y subirse a las escaleras de emergencia. Allí se encontró con el operador de la atracción, quien le gritó: "Te dije que la revisaras". El cliente afirma que se derrumbó debido a la adrenalina y que posteriormente prestó declaración al parque, al igual que otros testigos.
El cliente critica la respuesta del parque, ya que no le entregaron una copia del informe de incidente. "Me dijeron que no podía tenerlo porque su política establece que un gerente general tiene que dármelo. Entonces les pedí que me dejaran tomar una foto de él. No me lo quisieron dar", dijo.
El incidente ha generado preocupación sobre la seguridad de los parques temáticos en Arizona, que es uno de los ocho estados que no cuenta con un organismo regulador que supervise estos establecimientos. La ley estatal exige que los propietarios de las atracciones hagan inspeccionar sus parques anualmente y que tengan seguro, pero solo exige informes en casos de lesiones graves o muertes.
El cliente quiere que alguien sea considerado responsable de los riesgos de seguridad que, según él, podrían provocar la muerte de alguien. Aunque su familia recibió un reembolso del parque, el cliente considera que eso está lejos de resolver el problema.