El desafío "Seguridad en el Polo Sur: Diseñando el Sistema de Rescate Lunar de la NASA" se lanzó el 14 de noviembre y se centra en crear el equipo y los procedimientos para transportar a un astronauta incapacitado en caso de emergencia. Sin embargo, este sistema no está diseñado para trayectos cortos y fáciles de navegar. El plan de rescate debe permitir que un astronauta transporte a su compañero de tripulación herido o en peligro a una distancia de hasta 2 km (aproximadamente 1,24 millas) a través de la superficie lunar con pendientes de hasta 20 grados.
"En el entorno lunar implacable, la posibilidad de que un miembro de la tripulación se incapacite debido a circunstancias imprevistas (lesión, emergencia médica o accidente relacionado con la misión) es una preocupación crítica, comenzando con la próxima misión Artemis III, donde dos miembros de la tripulación explorarán el Polo Sur Lunar", explica la descripción del desafío.
El entorno lunar puede incluir rocas de hasta 65 pies de diámetro, cráteres de hasta 100 pies de ancho, "condiciones de iluminación únicas", así como temperaturas que oscilan entre 54 y -203 grados Celsius (entre aproximadamente 120 y -333 grados Fahrenheit). La gravedad lunar también es un factor importante, ya que un astronauta que pesa aproximadamente 755 libras en la Tierra, pesa solo 125 libras en la Luna.
Los diseñadores deben tener en cuenta que el sistema de rescate no incluirá un rover lunar, ya que no se espera que los vehículos regresen a la Luna hasta al menos la misión Artemis V. Los requisitos adicionales para los diseños incluyen un peso inferior a 50 libras, un tamaño compacto y materiales capaces de soportar las temperaturas, el vacío y el polvo regolítico del entorno lunar.
Los jueces buscan diseños que sean fáciles de desplegar y utilizar, y que empleen materiales adecuados para el entorno lunar. Los diseños también deben asegurar la seguridad no solo del astronauta incapacitado, sino también de su compañero de tripulación.
Un diseño exitoso "destacará la practicidad de su diseño en un escenario de emergencia, asegurando que pueda ser desplegado rápidamente y de manera efectiva cuando sea necesario".
Los mejores diseños podrían ganar hasta $20,000. El desafío está abierto hasta el 15 de enero de 2024.