Según documentos compartidos en Hugging Face, la plataforma clave para desarrolladores de IA, el DeepSeek-V3.2-Exp promete revolucionar el manejo de datos masivos con una tecnología llamada DSA (DeepSeek Sparse Attention), capaz de procesar documentos extensos y conversaciones complejas con la mitad del costo operativo de su predecesor. "No se trata solo de potencia, sino de hacer más con menos", explicó Adina Yakefu, representante de la comunidad china en Hugging Face.
Pero el verdadero giro está en el subsuelo tecnopolítico:
- DeepSeek anunció que optimizará sus modelos para chips fabricados en China, alineándose con la estrategia de Pekín de reducir la dependencia de semiconductores extranjeros.
- Esto ocurre en medio de las restricciones estadounidenses a la venta de chips avanzados de Nvidia al gigante asiático, medida que Washington justifica como protección a su seguridad nacional.
- El regulador chino de internet ya prohibió a empresas locales adquirir los RTX Pro 6000 de Nvidia, según filtraciones a The Financial Times.
Aunque en métricas puras de
inteligencia artificial el modelo aún no iguala a
ChatGPT-5 o
Claude de Anthropic, su desempeño rivaliza con
gpt-oss-120b, el modelo de código abierto de
OpenAI, según análisis de la firma
Artificial Analysis. Lo que realmente llama la atención es su arquitectura diseñada para operar en un escenario de
guerra tecnológica, donde cada decisión de hardware y software tiene implicaciones geopolíticas.
El lanzamiento experimental llega apenas meses después de que varios países, incluyendo Italia, Estados Unidos y Corea del Sur, bloquearan el uso de DeepSeek en agencias gubernamentales por preocupaciones de seguridad. Mientras Occidente debate los riesgos, China acelera su carrera por una IA hecha en casa, convirtiendo lo que era una startup en un caso de estudio sobre innovación bajo presión geopolítica.
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Xavier Rivera Martinez
el 30/09/2025 09:45 AM.
