BARCELONA, Esp
Llenan del cuero al Milán y están en cuartos de final.
Lionel Messi y el Barcelona volvieron a encandilar al mundo del futbol el martes cuando el astro argentino lideró con un doblete la victoria de su equipo 4-0 sobre el Milán para sellar el pase a los cuartos de final de la Liga de Campeones.
El marcador global de 4-2 dio un sufrido boleto al cuadro azulgrana, que se vio obligado a remontar el 2-0 en contra del partido de ida jugado en Milán.
La gesta en el Campo Nou precisó la aparición fulgurante del mejor Messi, que respondió con una actuación de primer nivel en una cita de altura.
Sumido en bache de juego las últimas semana, el Barsa recuperó el tono cuando parecía tener pie y medio fuera de la máxima competición continental.
Messi allanó el camino marcando a los cinco y 40 minutos, previo al tanto decisivo de David Villa a los 55 y el de propina de Jordi Alba en los descuentos, que culminó la primera remontada europea en el Camp Nou de la generación ganadora de tres Copas de Europa desde 2006.
Invicto en sus 10 últimos partidos, el Milán concedió más de un gol por primera vez desde su derrota más reciente y dijo adiós a una competición que ha conquistado en siete ocasiones, la última en 2007.
Pendiente de la vuelta de su timonel Tito Vilanova, quien maneja en el equipo desde Nueva York, donde está siendo sometido a un tratamiento contra el cáncer, Messi se aseguró poder seguir escalando en la lista de máximos cañoneros en Champions, donde figura segundo con 58 dianas, a 13 del líder histórico, el ex del Real Madrid Raúl González.
Jordi Roura, segundo entrenador, formó una alineación con cambios sensibles respecto la que perdió en Milan y consecutivamente frente al Madrid en la liga y la Copa del Rey por espacio de 20 días.
El principal damnificado fue el volante Cesc Fábregas, quien dejó su lugar a Villa, permitiendo la reubicación de Andrés Iniesta a su puesto preferido de volante.