Cats se llevan dos premios

Bennedict Mathurin mostró su atletismo en ráfagas cortas como estudiante de primer año la temporada pasada, contento de desempeñar un papel secundario en un equipo lleno de jugadores veteranos.

Necesitado para cumplir un papel más importante como estudiante de segundo año, el escolta de Arizona demostró ser uno de los mejores jugadores de la nación.

Tommy Lloyd de Arizona fue nombrado entrenador del año después de llevar a los Wildcats al título de la temporada regular en su primera campaña y el estudiante de primer año de Stanford, Harrison Ingram, fue el recién llegado del año.

“Es especial”, dijo Lloyd sobre Mathurin. “Es un placer entrenarlo y estoy feliz de que esté teniendo el éxito que tiene”.

Mathurin promedió 10,8 puntos y 4,8 rebotes como estudiante de primer año la temporada pasada. El escolta de 6 pies y 6 pulgadas de Montreal ayudó a llevar a los Wildcats a su primer título de temporada regular Pac-12 en cuatro años esta temporada, aumentando sus promedios a 17.3 puntos y 5.8 rebotes.

Y fue algo más que los números. Mathurin se convirtió en el jugador al que recurrían los Wildcats cuando necesitaban una gran canasta y, al menos un par de veces por partido, sorprende a la multitud con estruendosas volcadas.

“Tenía ganas de salir de la temporada y tenía que hacerlo solo, pero se trata de confiar en mis compañeros de equipo”, dijo Mathurin. “Confía en ellos en que pueden encontrarme y yo los encontraré. El objetivo es ganar, por lo que si obtengo 20 puntos o anoto cinco puntos, todo lo que quiero hacer es ganar”.

Mathurin ha ayudado a Lloyd a tener un comienzo impresionante en el desierto.

Arizona fue elegido para terminar cuarto después de que Lloyd fuera contratado fuera de Gonzaga, pero terminó convirtiéndose en uno de los mejores equipos de la nación.

Rápido y fluido como el programa que Lloyd ayudó a construir como asistente de Mark Few, los Wildcats ascendieron rápidamente en la clasificación a medida que se acumulaban las victorias. Arizona abrió la temporada con 11 victorias consecutivas, terminó la temporada regular 28-3 y se convirtió en el primer equipo en la historia de la Pac-12 en ganar 18 juegos de conferencia en una temporada, con marca de 18-2.

“Una vez que nos pusimos en marcha, fue como, ‘¿Por qué no?’. No voy a tratar de limitarme o limitar a este equipo porque temíamos el éxito o porque tal vez estaba sucediendo demasiado rápido”, dijo Lloyd. “Solo deja que se desarrolle. Manejémoslo día a día y actuemos como si hubiéramos estado allí antes”.

Ingram llegó a Stanford como uno de los principales reclutas en la historia del programa. El estudiante de primer año de 6-7 estuvo a la altura de las expectativas durante una productiva temporada de primer año, promediando 10.5 puntos y 6.6 rebotes mientras mostraba la versatilidad que podría llevarlo a convertirse en una selección de primera ronda del draft de la NBA.

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