Ataque de Jets causa lástima

NUEVA YORK
Hay muchos adjetivos que podrían describir el funcionamiento del ataque de los Jets de Nueva York tras ocho partidos de la campaña.
Ninguno es muy halagüeño.
Ineficaz, incapaz, incompetente. Son sólo algunas palabras que describen bien a la que es probablemente la peor ofensiva de la actualidad en la NFL.
El ataque de Nueva York ha anotado sólo ocho veces en el mismo número de partidos: Cinco envíos de anotación de Zach Wilson, dos de Breece Hall y otro de Nick Bawden.
Eso es todo.
El entrenador Robert Saleh no contempla cambios en las labores ofensivas, de modo que esa labor sigue correspondiendo a Hackett. Y no hay un cambio de quarterback en el futuro inmediato.
“Es un asunto colectivo. Todos necesitamos estar en la misma página”, dijo Saleh el martes.
Aaron Rodgers ha lanzado algunos pases durante los calentamientos previos a los partidos, apenas dos meses después de romperse el tendón de Aquiles izquierdo.
“Todavía nos falta”, reconoció Rodgers el martes en “The Pat McAfee Show”.
¿QUÉ FUNCIONA?
La defensiva. Ha lucido casi excelente.
Los Jets han anulado a quarterbacks como Josh Allen, Patrick Mahomes, Russell Wilson, Jalen Hurts y Justin Herbert. No han permitido que un solo quarterback llegue a 300 yardas en 26 duelos consecutivos. Y la defensiva ha mantenido en la pelea al equipo en todos los partidos, salvo el de la semana 2, una derrota por 30-10 ante Dallas.
¿QUÉ FALTA?
Leer de nuevo la parte de arriba. El ataque no puede entrar en la zona roja y los Jets siguen haciendo cortocircuito en sus series, al colocarse en situaciones de tercera y largo, por castigos y malas jugadas.