Buscan los Cats coronar año

TEMPE, Ariz
Los entrenadores harán todo lo posible para motivar a los nuevos jugadores para un juego de rivalidad.
Discursos, videos, recuperar a ex jugadores, cualquier cosa para que comprendan la importancia de vencer a su rival.
La táctica del entrenador de Arizona, Jedd Fisch, para el partido del sábado en Arizona State es simple.
Acabo de mostrarles el cartel”, dijo esta semana.
El cartel fue colocado por fanáticos de Arizona State en la Interestatal 10 entre Tempe y Tucson después de la paliza de los Sun Devils por 70-7 en 2020.

El letrero que decía No hay piedad para el gatito” entre corchetes junto al puntaje del juego ya no está allí (Fisch le mostró una foto al equipo), pero el recuerdo es un recordatorio para los fanáticos de los Wildcats de lo lejos que ha llegado el programa.
El entrenador Kevin Sumlin fue despedido poco después de la paliza en Tucson y Fisch fue contratado como su reemplazo, heredando una racha de 12 derrotas que se extendería a 20, un récord escolar.
Arizona terminó esa temporada 1-11, pero Fisch aún así logró recuperarse en una clase de reclutamiento estelar que se convertiría en la base del rápido ascenso de los Wildcats.

Después de tener marca de 5-7 la temporada pasada, Arizona (8-3, 6-2 Pac-12) se encuentra en medio de la mejor temporada del programa en años.
Los Wildcats han vencido a cuatro equipos clasificados en una temporada por primera vez desde 1989 y se dirigen a Tempe con una racha ganadora de cinco juegos Pac-12, la más larga desde 1998.
Arizona está en el puesto 16 en el Top 25 de AP después de haber sido clasificado por primera vez desde 2017 y puede ganarse un lugar en el juego de campeonato Pac-12 con una victoria y una derrota del No. 6 Oregon contra el No. 15 Oregon State. el viernes por la noche.
No tengo ninguna preocupación en absoluto sobre las emociones de nuestro equipo para este partido”, dijo Fisch.
Estamos jugando contra nuestro acérrimo rival. Es un duelo en el desierto. Son dos equipos del estado de Arizona los que se enfrentan”.
Si bien Arizona pasará a jugar su primer tazón desde 2017, la Copa Territorial es todo lo que les queda a los Sun Devils (3-8, 2-6).
Arizona State ha sido diezmada por las lesiones en la primera temporada del entrenador Kenny Dillingham y se dirige al juego de rivalidad con una racha de seis derrotas después de ser derrotado 49-13 por Oregon el fin de semana pasado.
"Les dije a nuestros muchachos que hay dos temporadas en las que juegas en ASU",

dijo Dillingham. Están los primeros 11 juegos, y esa es una temporada. Y luego está el equipo que viaja al sur la semana”.
Una de las lesiones más perturbadoras para Arizona State fue la del mariscal de campo Jaden Rashada en el segundo juego de la temporada.
Trenton Bourguet ha reemplazado admirablemente, pero ha estado maltratado toda la temporada. Alternó con el ala cerrada Jalin Conyers y el corredor Cam Skattebo contra Oregon mientras Dillingham intentaba todo lo que podía para darle chispa a los Sun Devils.
Rashada ha vuelto a entrenar, aunque el cuerpo técnico quiere asegurarse de que esté 100% sano antes de dejarle jugar de nuevo.
"Se ve mejor esta semana, así que veremos cómo progresa a lo largo de la semana", dijo Dillingham.
La mayor tarea defensiva de Arizona State será detener el juego aéreo de Noah Fifita y Arizona.
Los Sun Devils fueron derrotados por Bo Nix de Oregon, quien tuvo seis pases de touchdown en la primera mitad y 404 yardas en el juego.
Fifita ha estado excelente desde que Jayden de Laura se lesionó, lo suficiente como para conservar el trabajo cuando De Laura regresó. Ha lanzado para 1,988 yardas y 18 touchdowns con cuatro intercepciones mientras lleva a los Wildcats a cinco victorias consecutivas.
Arizona también tiene uno de los mejores dúos de receptores del país con Tetairoa McMillan y Jacob Cowing.
McMillan, quien podría terminar siendo una selección de primera ronda de la NFL, tiene 69 recepciones para 976 yardas y nueve touchdowns. Cowing, transferido de UTEP hace dos años, tiene 74 recepciones para 539 yardas y 10 TD.