El equipo, que aspiraba a ser un contendiente en la Conferencia Este, ya se encuentra con un récord de 1-6 antes de enfrentar a los Lakers este viernes. La situación se complica aún más con la ausencia de su estrella, Joel Embiid, quien se recupera de una lesión en la rodilla izquierda.
La más reciente baja es Tyrese Maxey, quien se vio obligado a abandonar el juego del miércoles contra los Clippers de Los Ángeles debido a una lesión en el tendón de la corva derecho. El escolta de 24 años, quien se espera que esté fuera de acción por al menos dos semanas, ha sido una pieza fundamental en el esquema de los Sixers. Maxey, un jugador que ha estado en constante ascenso desde su ingreso a la NBA, logró ser seleccionado al Juego de Estrellas en la temporada pasada y ganó el premio al jugador de mejor progreso de la liga. En reconocimiento a su potencial, los Sixers le otorgaron una extensión de contrato por cinco años y 204 millones de dólares durante la pretemporada. Su ausencia en el campo de juego será una pérdida significativa para el equipo.
La situación para los Sixers es compleja. La lesión de Maxey se suma a las ya existentes en la plantilla, incluyendo a Paul George de los Clippers, quien solo ha podido jugar dos partidos tras una lesión en la rodilla sufrida en la pretemporada. La presión sobre el equipo aumenta a medida que las lesiones continúan impactando la capacidad del equipo para competir.