Fue un partido reñido en el que ambos equipos lucharon hasta el final. Los Commanders llegaron con la oportunidad de tomar el primer lugar en la división, pero se fueron con su segunda derrota consecutiva.
La tensión se sintió en el segundo cuarto cuando el mariscal de campo de las Águilas, Jalen Hurts, sufrió un fuerte golpe en la cabeza que lo obligó a ser examinado en la carpa médica de la línea lateral. Afortunadamente, pudo regresar al juego y terminó con 221 yardas por aire.
El partido se definió en el último cuarto, donde Saquon Barkley brilló con 146 yardas y dos touchdowns que le dieron la ventaja definitiva a Filadelfia. La anotación de la ventaja llegó después de que Hurts fuera evaluado por una conmoción cerebral, demostrando una vez más su fortaleza mental.
Los Commanders, por su parte, intentaron una jugada arriesgada en cuarta oportunidad, pero fueron detenidos sin ganancia, lo que permitió a las Águilas tomar el control definitivo del partido. La victoria les aseguró su sexto triunfo consecutivo, consolidándolos como un equipo formidable en la NFC Este.