Marineros dominan 2-0 a Azulejos y buscan su primer banderín de la Liga Americana

"Sabemos que no está terminado", advirtió el manager Dan Wilson, evitando cualquier celebración prematura.

Detrás del marcador 2-0 hay una combinación letal: pitcheo dominante y ofensiva explosiva. Bryce Miller sorprendió en el primer juego con apenas tres días de descanso, mientras que los bates despertaron con furia en el segundo encuentro. Los Azulejos, favoritos al comenzar la serie, ahora enfrentan una pared de concreto.

• El factor local: Seattle recibe los próximos dos juegos en T-Mobile Park
• Artillería pesada: George Kirby y Luis Castillo listos para los duelos clave
• La estadística ominosa: Ningún equipo en la historia ha remontado 0-3 en postemporada

Toronto no se rinde. Apostarán al dúo de ases Shane Bieber y Max Scherzer para intentar torcer el rumbo. "Tenemos la rotación para cambiar esto", declaró el manager John Schneider, aunque sus palabras sonaron más a esperanza que a certeza.

Mientras los Azulejos buscan oxígeno, los Marineros huelen sangre. El fantasma de 2001 -cuando perdieron 116 juegos- parece quedar atrás. Esta generación escribe su propia narrativa, con jugadas claves como el hombre sobre ruedas que selló la victoria en el segundo juego. La afición en Seattle, que lleva 46 años esperando una Serie Mundial, ya sueña despierta.

El ambiente en el vestuario azul es distinto. "Nos han puesto contra las cuerdas antes", recordó el relevista Jeff Hoffman, aunque los números muestran otra cosa: Toronto ha perdido 12 de sus últimos 13 juegos de postemporada como visitante. Una estadística que pesa como losa cuando más necesitan romperla.

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