Este fin de semana, el destino de varios equipos pendía de un hilo, un hilo que se rompería con cada anotación, cada intercepción, cada jugada decisiva.
Pero la sorpresa llegó antes de lo esperado, antes incluso de que los 49ers de San Francisco pisaran el campo en Miami. La noticia, un golpe de realidad que sacudió a los aficionados: su equipo, los campeones defensores de la NFC, estaban fuera de la contienda por los playoffs. La razón? Las inesperadas victorias de otros equipos que se jugaban la clasificación.
La victoria de los Commanders sobre los Eagles de Filadelfia selló el destino de San Francisco, arrebatándoles cualquier posibilidad de acceder como comodín. Para rematar, el triunfo de los Rams de Los Ángeles sobre los Jets de Nueva York acabó con las últimas esperanzas de los Niners de ganar el título del Oeste de la NFC. Los Rams se aseguraron la victoria gracias a su barrida en la temporada regular contra San Francisco. “Una derrota que no esperábamos, pero que nos demuestra la igualdad de esta liga”, podría haber dicho cualquier analista deportivo.
Esta eliminación marca un momento histórico para los 49ers, convirtiéndose en el decimosexto equipo en la historia de la liga en perderse la postemporada después de haber jugado el Super Bowl. Recordemos que cayeron 25-22 ante los Chiefs de Kansas City en el Super Bowl LVIII el pasado 11 de febrero. Una situación similar vivieron en la temporada 2019-2020, tras ganar el título de la NFC y perder posteriormente en el Super Bowl ante los mismos Chiefs, para luego quedar fuera de los playoffs al año siguiente. La historia se repite, aunque con un sabor amargo.
La jornada dominical también dejó fuera de la carrera a otros equipos importantes. Los Cowboys de Dallas, víctimas de la victoria de los Commanders; los Saints de Nueva Orleans, derrotados por los Falcons de Atlanta, quienes a su vez vencieron a los Giants de Nueva York; y los Cardinals de Arizona, tras una derrota en Carolina. Una cascada de eliminaciones que dejó claro que esta temporada de la NFL fue una de las más impredecibles.
En la AFC, los Dolphins, dependían del resultado del partido de los 49ers para mantener sus esperanzas de playoffs. Un panorama complejo que resalta la intensidad y la competitividad de la liga, donde cada partido es crucial y el destino de los equipos puede cambiar en un instante.