Los contratos de arbitraje se convierten en el centro de las conversaciones, determinando el futuro de jugadores clave.
En medio de este frenético ambiente, los Astros de Houston han cerrado un acuerdo crucial con uno de sus lanzadores. Se trata de Luis García, el derecho venezolano que ha demostrado su valía en la lomita, a pesar de un 2023 marcado por la recuperación de una cirugía Tommy John.
García, de 28 años, se sometió a la operación el 19 de mayo del año pasado. Su regreso a las menores, con un par de apariciones el 28 de junio y el 4 de julio, fue un indicio de su progreso, aunque la recuperación fue más lenta de lo esperado. “Fue un proceso largo, pero estoy contento con el resultado,” afirmó García en declaraciones no oficiales, según fuentes cercanas al equipo.
Su historial previo a la lesión habla por sí solo: un registro de 28-19 con una efectividad de 3.61 en 63 aperturas y seis apariciones como relevista entre 2020 y 2023. Incluso, tuvo la oportunidad de representar a Venezuela en el Clásico Mundial de Béisbol 2023, demostrando su compromiso y talento a nivel internacional.
El acuerdo alcanzado con los Astros asegura a García un contrato de un año por $1,875,000 dólares, la misma cantidad que percibió el año pasado a pesar de no jugar en las Grandes Ligas. Esta decisión refleja la confianza del equipo en su potencial y en su pronta recuperación completa.
Mientras tanto, la tensión continúa para otros siete jugadores de los Astros: Bryan Abreu (lanzador derecho), Framber Valdez (lanzador zurdo), Jeremy Peña (campocorto), Isaac Paredes (tercera base), Mauricio Dubón, Chas McCormick y Jake Meyers (jardineros), quienes aún esperan definir sus salarios a través del proceso de arbitraje. Las próximas semanas serán cruciales para conocer el desenlace de estas negociaciones y el impacto en el equipo para la próxima temporada.