La exaltación de Ichiro Suzuki, un nombre que resonará por siempre en la historia del béisbol, estuvo a punto de ser manchada por una anomalía. De las 394 boletas emitidas por la Asociación de Escritores de Béisbol de Norteamérica (BBWAA), Ichiro recibió 393 votos a su favor. Una sola boleta, un único voto, se negó a reconocer su excepcional trayectoria.
La identidad del votante que decidió omitir a la leyenda japonesa sigue siendo un enigma. Aunque las reglas del Salón de la Fama permiten a cada votante decidir si hace pública su boleta, la “invitación a tomar algo y charlar” que Ichiro extendió a este anónimo crítico, ha generado gran interés en la comunidad del béisbol y en la opinión pública. El hecho de que el mismo Ichiro haya manifestado su deseo de saber quién fue, otorga más peso al misterio.
Este evento contrasta con la casi unánime aceptación de otros jugadores. Mariano Rivera, con el 100% de los votos en 2019 (425 de 425 boletas), o Derek Jeter, con 395 de 396 en 2020, son ejemplos de la aclamación casi universal que pueden recibir las figuras más icónicas del deporte. En este año, además de Ichiro, también fueron elegidos CC Sabathia y Billy Wagner, integrándose a la ceremonia de exaltación del 27 de julio junto con Dave Parker y Dick Allen (elegidos por el comité de la era clásica).
Las estadísticas de Ichiro son imponentes: dos veces campeón de bateo de la Liga Americana, 10 veces All-Star, ganador del Guante de Oro, y una asombrosa carrera con .311 de promedio de bateo, 117 jonrones, 780 carreras impulsadas y 509 bases robadas en la MLB, a lo que hay que sumar sus impresionantes 1.278 hits en Japón. Su total combinado de 4.367 hits supera ampliamente el récord de Pete Rose (4.256). “Quizás el mejor bateador de contacto de todos los tiempos”, comentan muchos expertos.
La BBWAA, en su reunión de diciembre de 2016, votó por la transparencia (80-19) a favor de publicar todas las boletas, pero el Salón de la Fama dejó la decisión final en manos de cada elector. La persistencia de este misterio en torno a un solo voto faltante deja una puerta abierta a la especulación, manteniendo viva la conversación sobre la elección de Ichiro y el proceso del Salón de la Fama.