Pogacar renuncia a clásicas para conquistar París-Roubaix

Se trata de una modificación que implica un cambio de enfoque y una apuesta audaz hacia una prueba mítica.
El esloveno Tadej Pogacar, tricampeón del Tour de Francia y actual campeón mundial de ruta masculino, ha sorprendido al mundo al descartar su participación en la E3 Saxo Classic y la Gent-Wevelgem, competencias que inicialmente formaban parte de su plan de entrenamiento. Esta decisión, según ha anunciado su equipo, el UAE Team Emirates, se debe a una reestructuración de su calendario para enfocarse en dos carreras icónicas: el Tour de Flandes y la París-Roubaix.
“La París-Roubaix es un desafío digno de su talento”, afirmó Thierry Gouvenou, director de la carrera. “Está lejos de ser una victoria garantizada”, agregó, reconociendo la dificultad que representa el “Infierno del Norte” para un ciclista de las características de Pogacar. Su objetivo: convertirse en el primer campeón del Tour en ganar en Roubaix desde el legendario Bernard Hinault en 1981. Una meta ambiciosa, sin duda.
Pogacar, con siete monumentos en su palmarés (un Tour de Flandes, dos Lieja-Bastoña-Lieja y cuatro Tour de Lombardía), busca añadir a su colección el prestigioso título de París-Roubaix. A sus 26 años, es considerado por muchos como el nuevo Eddy Merckx, capaz de brillar en cualquier terreno. Aunque sin experiencia previa en la “Reina de las Clásicas”, su paso por algunos tramos adoquinados en el Tour de Francia 2022 le brindó un valioso anticipo de la dificultad que le espera.
La París-Roubaix 2025, con sus 259.2 kilómetros y 55.3 kilómetros de adoquines, presentará un desafío extremo. Este año, la organización ha añadido nuevas secciones empedradas, incluyendo mejoras al temido Trouée d’Arenberg, y se ha revisado el controvertido cambio de sentido del año pasado, criticado por ciclistas como Mathieu van der Poel, quien será uno de sus principales rivales. La carrera femenina, por su parte, recorrerá 148.5 kilómetros con 29.2 km de adoquines.
El cambio en el calendario de Pogacar no solo refleja su ambición, sino también una estrategia calculada para llegar en óptimas condiciones a estas pruebas exigentes. El “Infierno del Norte” espera a un ciclista dispuesto a escribir un nuevo capítulo en la historia del ciclismo.