Grandes inversiones, pobres resultados: la crisis de los equipos estrella del béisbol

En el Este de la Liga Nacional, los Mets de Nueva York (con un presupuesto récord de 326 millones de dólares) apenas sostienen un frágil liderato. Mientras, los Dodgers, segunda nómina más cara del deporte, acumulan derrotas en julio como si fueran un equipo en reconstrucción. No están solos: los Yankees, terceros en gasto, ven cómo su ventaja divisional se esfuma ante los Azulejos.
Las estadísticas revelan una crisis silenciosa:
La fecha límite de cambios se acerca y los tres clubes buscan refuerzos, pero hay un problema: el impuesto de lujo. Los Dodgers deberían pagar 151 millones extra, cifra que supera el payroll completo de siete franquicias. Steve Cohen, dueño de los Mets, bromeó en primavera: "Soy un tacaño comparado con ellos".
Mientras analistas debaten si la MLB necesita un tope salarial, los números muestran que el dinero no garantiza triunfos. En la última década, solo dos campeones (Dodgers 2020 y Medias Rojas 2018) fueron el mayor gastador de su año. Una lección que esta temporada se está cobrando facturas millonarias.