Muere Ron Turcotte, leyenda del turf y jinete de Secretariat

Su partida no solo deja un vacío en el deporte, sino también el recuerdo de un hombre que supo convertir la adversidad en inspiración.

Según confirmó su familia a través de un comunicado, Turcotte murió por causas naturales este viernes. "Ron fue un gran jinete e inspiración para muchos, tanto dentro como fuera del mundo de las carreras", declaró Leonard Lusky, su socio y amigo cercano. Detrás de las estadísticas y los triunfos, había una historia de resiliencia que trascendió las pistas.

El legado de un campeón

• Ganó la Triple Corona en 1973 con Secretariat, el caballo que rompió récords y cautivó a una generación.
• Su marca de 2:24 en el Belmont Stakes, con una ventaja de 31 cuerpos, sigue imbatible después de 52 años.
• Conquistó el Derby de Kentucky, el Preakness y el Belmont Stakes en dos ocasiones cada uno.

Pero más allá de los laureles, Turcotte enfrentó un giro dramático en 1978. Una caída durante una carrera lo dejó parapléjico, poniendo fin a su trayectoria como jinete. Sin embargo, lejos de rendirse, dedicó sus esfuerzos a apoyar a otros jinetes con discapacidades a través del Permanently Disabled Jockeys Fund.

"Aún tenía mucho caballo cuando pasé la meta", recordó Turcotte en una entrevista en 2023, casi cinco décadas después de aquella carrera histórica. "No estaba cansado... Fue increíble". Sus palabras reflejaban la misma pasión que lo llevó a lo más alto.

Nacido en 1941 en el seno de una familia numerosa, Turcotte abandonó la escuela para trabajar como leñador antes de descubrir su vocación en el hipódromo. Comenzó como cuidador de caballos, pero su talento lo llevó rápidamente a las carreras. Para 1972, ya era una estrella, gracias a sus victorias con Riva Ridge. Sin embargo, fue su alianza con Secretariat la que lo inmortalizó.

El presidente de la New York Racing Association, David O’Rourke, lo describió como "un hombre cuyo verdadero carácter se reveló después de su lesión". Mientras el público lo recordaba por sus hazañas deportivas, su familia lo despidió con un mensaje íntimo: "Para nosotros fue un maravilloso esposo, un padre amoroso y un abuelo dedicado".

Con su muerte, se cierra un capítulo en la historia de las carreras. Turcotte era el último sobreviviente del equipo que hizo posible la leyenda de Secretariat. Ahora, su nombre queda grabado no solo en los libros de récords, sino en el corazón de quienes admiran el coraje y la humildad frente a la gloria y el desafío.

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