Djokovic desafía el tiempo: semifinales del US Open a los 38 años

"No va a ser fácil, te lo digo", admitió con una sonrisa pícara tras vencer a Taylor Fritz en cuartos de final. Sus palabras, más que un reconocimiento, suenan a advertencia para sus rivales.
Detrás de esa barba canosa hay una máquina competitiva que sigue pulverizando récords: 24 Grand Slams, 37 finales mayores y la marca histórica de semanas como número uno. Pero ahora enfrenta un desafío distinto: Carlos Alcaraz (22 años) y Jannik Sinner (23) representan la nueva generación que amenaza su reinado. La estadística es contundente: entre ambos acumulan 9 de los últimos 12 torneos importantes.
El escenario está servido para un choque épico. Si supera a Alcaraz, podría encontrarse con Sinner, verdugo suyo en Roland Garros y Wimbledon este año. Djokovic lo sabe: "Probablemente todos esperan una final entre ellos. Intentaré desbaratar esos planes". Su última frase resonó como un manifiesto: "Definitivamente no voy con bandera blanca a la cancha".