Cristian Nodal llama 'privilegio' a la ansiedad y desata polémica en redes

Cristian Nodal, el cantante que ha dominado las listas de popularidad con su mezcla de regional mexicano y urbano, confesó en una reciente entrevista con Caracol Televisión que lleva más de dos años en terapia psicoanalítica. "Me ha ayudado un montón a canalizar y entender muchas cosas de la vida", aseguró con una franqueza que, en principio, podría parecer refrescante. Sin embargo, fue una frase en particular la que encendió las alarmas en redes sociales.
El polémico comentario llegó cuando Nodal, al hablar sobre sus procesos emocionales, soltó: "La ansiedad es un privilegio". La declaración, aparentemente sacada de contexto, desató una ola de críticas inmediatas. ¿El motivo? Para miles de personas que lidian día a día con trastornos de ansiedad, lejos de sentirse "privilegiados", enfrentan síntomas incapacitantes como:
Lo curioso es que el propio Nodal intentó adelantarse a las críticas durante la misma entrevista: "Soy cantante. No soy ejemplo para nadie", declaró. Pero en la era de la hiperconexión, donde las celebridades son vistas —les guste o no— como referentes, esa postura resulta difícil de sostener. Más aún cuando se trata de salud mental, un campo donde las palabras pesan más que las intenciones.
Este no es el primer tropiezo comunicacional del intérprete de "Adiós Amor". A lo largo de su carrera, Nodal ha sido protagonista de múltiples polémicas, desde sus declaraciones sobre el género regional hasta sus batallas públicas con otros artistas. Pero esta vez, el error podría ser distinto: mientras que antes sus dichos generaban risas o indignación pasajera, hablar de ansiedad como "privilegio" toca fibras mucho más sensibles en una generación que, según la OMS, presenta niveles récord de trastornos mentales.
Mientras tanto, en redes sociales la conversación sigue viva. Algunos defienden al cantante argumentando que su frase fue sacada de contexto o malinterpretada. Otros insisten en que, más allá de las intenciones, el mensaje que llegó fue peligroso. Lo cierto es que, en el proceso de normalizar las conversaciones sobre salud mental, a veces incluso las buenas intenciones pueden tropezar con la complejidad de los diagnósticos reales.