CD. DE MÉXICO
Alexander Acha está de regreso en el mundo de la música. A tres años de haber lanzado el disco La vida es, el cantante presenta su tercera producción discográfica.
Claroscuro es el nombre de este proyecto, que contó con la producción del italiano Loris Ceroni y la ayuda en la composición de autores como Yoel Henríquez, Jorge Luis Piloto, Fernando Osorio, y Jorge Domínguez, entre otros.
De acuerdo con el cantante, en esta producción buscó hacer un cambio en su música, ya que quería ofrecerle a su público algo distinto, por lo cual se adentró en la mezcla de géneros como el funk, godspell y electrónico, entre otros.
Es un disco en el que la base es pop, que trae varias influencias musicales que revisten este material. Son 14 temas en el álbum digital y 12 en el físico.
La mayoría de las canciones son coautorías que escribí con otros compositores, fue como un trabajo en equipo, por eso tiene tantos colores y el nombre, por los contrastes que hay de ritmos, de estilos, de temáticas”, dijo en entrevista.
En ese sentido, Acha aseguró que tras haber realizado discos un tanto más serios, en esta ocasión decidió apostar por algo más alegre. Así, Claroscuro tiene 12 temas en su formato físico y 14 en el digital.
“Es un disco muy fresco, divertido, que puedes escuchar completo, que cada canción tiene lo suyo y una personalidad particular, un disco juvenil, sencillo más no simple. Lo simple a veces puede ser aburrido y faltarle algo, como sabor. Lo sencillo no se complica pero puede ser muy rico en su contenido. Todo es expresado de una forma sencilla y creo que así está este disco”, aseguró.
En ese sentido, incluir ritmos más movidos y bailables era indispensable. “También tiene sus oscuros, por eso tiene canciones de dolor y temas más difíciles, pero lo que prevalece es la luz, la alegría, esperanza e ilusión.
En este disco le dimos otro sonido, no es tan orgánico, es más electroacústica, más fusionado con sonidos electrónica, con beats que pueden entrar a los antros. Antes tuve canciones rítmicas pero más acústicas; por el contrario, aquí entramos con un sonido más funk y electrónico a los temas más rítmicos”, afirmó.
Si bien decidió cambiar los ritmos, Acha también apostó por las letras, ya que aseguró que las vivencias de los últimos tres años le ayudaron a crear un disco más maduro.
“A diferencia de mis discos anteriores, ahora incluyo la madurez y el tiempo que vas adquiriendo en tu carrera y forma de componer e interpretar. Es un disco que compuse en un momento muy inspirado de mi vida, con muchas ilusiones, con bastante adrenalina por la incertidumbre de muchas cosas que debían tomar un curso más claro, muy enamorado de mi novia en ese momento, por eso digo que tiene mucha luz y es más alegre.
“Yo no me considero maduro, porque toda la vida vas evolucionando. Todo es constante durante la vida, vas cambiando para bien o para mal, vas perfeccionándote o perdiéndote en tu rollo, con tu personalidad, conocimiento, sabiduría, tu temple emocional, pero la madurez en la que hice este disco es mayor a la que tenía con el primer disco”, dijo.
Claroscuro es el tercer álbum del intérprete de temas como Te amo o Dame tu amor, hecho que representa un reto para él, ya que muchas veces los discos número tres ayudan a definir la carrera.
No me da miedo. Confío mucho en este disco, lo digo sinceramente. Lo escucho por puro gusto, no porque sea mío. Me gusta y considero que hay grandes músicos; en todos los sentidos fue un gran trabajo en equipo. Creo que le va a ir bien, no sé qué tanto pero siento que a la gente le va a encantar”, señaló.
En ese sentido, el cantante confía en tener una carrera tan larga como la de Emmanuel, su padre, de quien ha aprendido a escuchar los consejos que le ha ofrecido.
“Le he aprendido mucho a mi papá: el tiempo que he pasado a su lado en esta carrera hicimos una gira, de niño me la vivía en los ensayos con él y me paré muchas veces en un escenario.
“Me dijo que no deje de aprender, de esforzarme, porque no te puedes estancar. Es como una relación de amor, si todo es rutina... es lo peor la monotonía.
Todo lo que hacemos debe ser por amor, que lo vas perfeccionando, porque aprendes a amar. Soy una persona apasionada, muy inquieta, incluso hiperactivo. Me gusta estar siempre creando cosas, soy bastante creativo y eso me alimenta y me llena de energía y es lo que más hago: componer y escribir y generar ideas para mi carrera, pero también me apasiona la naturaleza, lo que sucede en mi país, en el mundo”, finalizó.