Lady Gaga viaja de copiloto en las 500 Millas de Indianápolis
La cantante neyorquina Lady Gaga se conduce a toda velocidad no sólo en su carrera musical sino también en sus ratos de ocio, como lo hizo al participar de copiloto en el centenario de la celebración de la carrera con más tradición en el deporte automotor de Estados Unidos, las 500 Millas de Indianápolis
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El diario de Sonora
el 30/05/2016 12:00 AM, Sección Espectáculos
Última edición 06/05/2024 04:50 AM.
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CD. DE MÉXICO.
La cantante neyorquina Lady Gaga se conduce a toda velocidad no sólo en su carrera musical sino también en sus ratos de ocio, como lo hizo al participar de copiloto en el centenario de la celebración de la carrera con más tradición en el deporte automotor de Estados Unidos, las 500 Millas de Indianápolis.
Gaga asistió a la carrera como reemplazo por Keith Urban, quien estaba pautado a subir al auto junto al legendario piloto italiano Mario Andretti, pero debido a una lesión de espalda, el músico de country y también esposo de la actriz Nicole Kidman no pudo cumplir con su asistencia al Indianapolis Motor Speedway.
Ella va a distraerme un poco, en realidad. Espero que pueda mirar hacia adelante mientras estoy conduciendo”, bromeó el italiano de 76 años.
La carrera con más tradición en el deporte automotor de los Estados Unidos, que en la actualidad conjuga a los mejores pilotos de la categoría Indycar este domingo cumplió su histórico centenario.
CIEN AÑOS DE LAS 500
La pista de Indianápolis se inauguró en 1909 y dos años después es cuando se efectuó la primera prueba de las 500 millas.
El piloto que ganó esa carrera fue Ray Harroun, quien inició la competencia en el lugar 28 en la parrilla de salida para después de las 200 vueltas alzarse con el triunfo.
Los periodos de guerra hicieron que la competencia fuera pospuesta en seis ocasiones. Las pruebas de 1917 y 1918 fueron suspendidas como consecuencia de la Primera Guerra Mundial y de 1942 a 1945 la carrera no se llevó a cabo por la Segunda Guerra Mundial.
SE BRINDA CON LECHE
Una tradición que prevalece en las 500 Millas de Indianápolis es la celebración con una botella de leche de parte de los pilotos que cruzan la meta en primer lugar.
Esta costumbre inició en 1933 cuando Louis Meyer pidió un vaso de leche, tras ganar por segunda ocasión la carrera.
LAS MUJERES NO ERAN BIENVENIDAS
Por 60 años, la presencia femenina no fue permitida en la pista de Indianápolis.
Fue hasta 1971 cuando los organizadores del evento accedieron a que mujeres periodistas pudieran ingresar al área de fosas para realizar su trabajo.
En la historia de las 500 millas de Indianápolis han existido nueve competidoras buscando la gloria del triunfo.
La cantante neyorquina Lady Gaga se conduce a toda velocidad no sólo en su carrera musical sino también en sus ratos de ocio, como lo hizo al participar de copiloto en el centenario de la celebración de la carrera con más tradición en el deporte automotor de Estados Unidos, las 500 Millas de Indianápolis.
Gaga asistió a la carrera como reemplazo por Keith Urban, quien estaba pautado a subir al auto junto al legendario piloto italiano Mario Andretti, pero debido a una lesión de espalda, el músico de country y también esposo de la actriz Nicole Kidman no pudo cumplir con su asistencia al Indianapolis Motor Speedway.
Ella va a distraerme un poco, en realidad. Espero que pueda mirar hacia adelante mientras estoy conduciendo”, bromeó el italiano de 76 años.
La carrera con más tradición en el deporte automotor de los Estados Unidos, que en la actualidad conjuga a los mejores pilotos de la categoría Indycar este domingo cumplió su histórico centenario.
CIEN AÑOS DE LAS 500
La pista de Indianápolis se inauguró en 1909 y dos años después es cuando se efectuó la primera prueba de las 500 millas.
El piloto que ganó esa carrera fue Ray Harroun, quien inició la competencia en el lugar 28 en la parrilla de salida para después de las 200 vueltas alzarse con el triunfo.
Los periodos de guerra hicieron que la competencia fuera pospuesta en seis ocasiones. Las pruebas de 1917 y 1918 fueron suspendidas como consecuencia de la Primera Guerra Mundial y de 1942 a 1945 la carrera no se llevó a cabo por la Segunda Guerra Mundial.
SE BRINDA CON LECHE
Una tradición que prevalece en las 500 Millas de Indianápolis es la celebración con una botella de leche de parte de los pilotos que cruzan la meta en primer lugar.
Esta costumbre inició en 1933 cuando Louis Meyer pidió un vaso de leche, tras ganar por segunda ocasión la carrera.
LAS MUJERES NO ERAN BIENVENIDAS
Por 60 años, la presencia femenina no fue permitida en la pista de Indianápolis.
Fue hasta 1971 cuando los organizadores del evento accedieron a que mujeres periodistas pudieran ingresar al área de fosas para realizar su trabajo.
En la historia de las 500 millas de Indianápolis han existido nueve competidoras buscando la gloria del triunfo.
