Interpol hipnotiza a México

La banda neoyorquina hizo vibrar a las 21 mil personas que se dieron cita en el Palacio de los Deportes, como parte de su gira The Other Side of Make-Believe

Interpol hipnotiza a México
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Hola”, así fue como Paul Banks se presentó frente a más de 21 mil personas que abarrotaron el Palacio de los Deportes para ver a Interpol en su regreso a los escenarios mexicanos con su gira The Other Side of Make-Believe, la cual toma el nombre de su próximo disco.

 Después de que las notas de Untitle se apagaran, en ese breve espacio de silencio el público aprovechó para darle a los neoyorquinos una pequeña muestra de amor. Interpol, Interpol, Interpol”, se escuchó en el recinto antes de que las primeras notas de Evil se apoderaran del lugar.

Muchísimas gracias, es un placer estar aquí con todos ustedes, para comentarles que Sam se enfermó y no podrá tocar esta noche, pero aquí esta nuestro amigo Chris”, dijo Banks en perfecto español, señalando que Sam Fogarino, baterista, estaba en el recinto, pero no actuaría.

 Con un diseño de iluminación que simulaba un desnivel de colores, las canciones fueron llenándose de esa peculiar forma que tiene Interpol de darles vida. Ahora viene una nueva”, dijo Banks antes de darle voz a Fables, sencillo de su disco The Other Side of Make-Believe Tour, el cual saldrá en julio.

Imprevisto. El baterista Sam Fogarino se enfermó, por lo que no pudo estar presente en el show. Paul Banks se dirigió al público en todo momento en español.

Luces destellantes que encendieron de forma vertical y horizontal en tonos azules y rojos, junto con algunos estrobos enloquecidos y la inconfundible guitarra de Daniel Kessler dieron vida a If You Really Love Nothing, Obstacle 1 y Take You on a Cruise.

 Durante casi tres décadas Interpol le ha dado a sus fans en el mundo ese sonido en el que el rock y la reflexión se hacen cómplices y llevan a lugares mentales excepcionales.

Interpol lo sabe y sus fans también, por lo que no dudan en volverse uno solo, como lo hicieron en temas como Toni, Pioneer of the Fall y Narc.

Dos años de confinamiento tuvieron a Interpol fuera del camino y las giras, ahora que los recintos han vuelto a abrir sus puertas -y no existen más medidas de seguridad excepto las que cada uno se imponga-, los neoyorquinos no dejan de agradecer cada aplauso y cada grito que el público les otorga.

Todos ahora valoramos mucho más el poder convivir con otras personas, y eso es lo que pasa en los conciertos, nos convertimos en eso”, dijo Fogarino antes del show.

 All the Rage Back Home y Rest My Chemestry lograron que hasta los más puristas seguidores de la agrupación se unieran a ese momento en el que todo se ilumina no sólo por la música, sino por las lámparas de los celulares que hacen que el público se vuelva parte del show.

Así, cada uno en lo suyo, Banks en las voces y Kessler en las guitarras, mientras que los arreglos de las percusiones de Fogarino que interpretaba Chris, fue como llegaron The New, The Heinrich Maneuver, The Rover y C’Mere que hicieron saltar y vibrar a los presentes.  

Una breve despedida y el grito del público para alargar lo más posible el encuentro hizo que Banks, Kessler y el resto de los músicos volvieran al escenario para interpretar Lights, PDA y Slow Hands.

Lo quer parecía ser el final de la velada tuvo un último suspiro cuando Interpol volvió al escenario una vez más para que su público recordara esta noche, la cual cerraron con Jail, como uno de los regresos pospandémicos más energéticos.

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