Sin embargo, este acto de celebración se convirtió en un foco de controversia, desatando una ola de críticas hacia la cantante en redes sociales.
El principal punto de fricción radica en los "orígenes" de Belinda y sus declaraciones previas sobre su identidad. Nacida en España, la cantante ha expresado en diversas ocasiones que no se considera mexicana y ha preferido vivir en España durante varios períodos de tiempo.
"No es mexicana y no representa México", "Habiendo tantas artistas mexicanas, llevan a Belinda", "No estoy de acuerdo, ella ha negado ser mexicana, que decepción", fueron algunas de las reacciones de los usuarios en redes sociales.
Las críticas se intensificaron al contrastar la elección de Belinda con otros artistas que sí se han reconocido abiertamente como mexicanos y han demostrado un profundo orgullo por su nacionalidad, como Pedro Fernández, Aída Cuevas, e incluso Camila Fernández, nieta de Vicente Fernández.
A pesar del revuelo generado, otros usuarios salieron en defensa de Belinda, argumentando que tiene una exitosa carrera en México y que forma parte de la "cultura pop" del país.
Sin embargo, la controversia pone de manifiesto la importancia de la representación y la responsabilidad que conlleva ser una figura pública, especialmente al ser elegida para representar a un país en un acto tan significativo.
A pesar del revuelo, Belinda ha mantenido silencio ante las críticas. En semanas pasadas, como parte de su regreso a la música, lanzó su tercer sencillo del año, "La Mala", grabado en Guanajuato, un lanzamiento que muchos interpretan como un mensaje a sus detractores y a los medios de comunicación.