Tras la separación con Andrea, el músico y actor se ha mudado a un departamento propio. En una conversación con la prensa, Erik se mostró tranquilo y abierto sobre este cambio. "Es como se dieron las cosas, la verdad nunca hubo prisa porque al contrario, hay una gran relación y nada, en efecto, ya vivo en mi depa...", confirmó.
Aunque la pareja ya no comparte la misma casa, Erik enfatiza la excelente relación que mantiene con Andrea. "Convivimos diario, como ahí diario, ahí está mi estudio, ahí están mis hijas, ahí está Andrea, qué les puedo decir, no hay engaño sobre que hay un gran amor y hay una gran amistad y una gran relación...", expresó con sinceridad.
La nueva vida de Erik se ha adaptado a su ritmo, disfrutando de su independencia y manteniendo un fuerte vínculo familiar con Andrea y sus hijas, Mía y Nina. Su nuevo hogar, ubicado en el mismo edificio donde Andrea continúa residiendo, facilita la interacción diaria, creando un ambiente familiar y confortable para todos.