El ataque a André, no fue un hecho aislado. La actriz reveló que el mismo niño había molestado a su hijo durante meses, lo que elevó su preocupación a otro nivel. "Me hablan del colegio y me dicen 'mordieron a André'. No le di tanta importancia, porque son niños, pero cuando me di cuenta que fue el mismo niño que lo ha estado molestando, todo cambió", relató Sherlyn.
La desesperación se apoderó de la actriz al darse cuenta de que la situación no era un caso aislado, sino un problema que se arrastraba durante meses, sin que la escuela o los padres del agresor tomaran medidas. "Cuando fui al colegio para ver qué se va a hacer, porque requiero que se tomen medidas, la respuesta fue 'no será ni la primera ni la última vez, son cosas de niños'", mencionó Sherlyn, con un tono de voz que reflejaba la impotencia que siente.
"Sí es muy grave", afirmó Sherlyn, "el autoconcepto, la autoestima de los niños, la seguridad la van adquiriendo en los primeros años de edad. No podemos normalizar eso y tenemos que tener los oídos abiertos para poner atención en esas cosas… Al final lo que aprenden de niños, hacen de grandes".
El mensaje de Sherlyn se ha convertido en un llamado de atención para los padres y la comunidad educativa. La actriz, con su valentía, ha puesto en la mesa la discusión sobre la importancia de la atención a las señales de violencia escolar, y la necesidad de actuar con responsabilidad para evitar que la indiferencia sea el caldo de cultivo de situaciones que pueden marcar de por vida a niños y adolescentes.