La actriz, que ha sido objeto de críticas por sus opiniones, reveló que algunos amigos decidieron distanciarse de ella en redes sociales, acusándola de alinearse con posturas extremas. “He sido advertida de que me estoy alineando con lo ‘anti’”, comentó Bateman, quien ha estado en el ojo público desde 1982. “Si quieres buscar citas que respalden esa idea, adelante, pero no encontrarás nada”.
Bateman argumenta que, durante la administración actual y antes de ella, Estados Unidos ha estado bajo una “nube que presiona sobre la sociedad”. Se refiere a la dinámica de las redes sociales, donde cualquier opinión o cuestionamiento sobre temas candentes se enfrenta a un conjunto limitado de “posiciones permitidas”. “Man, nos hemos ido ‘1984’ a nosotros mismos”, expresó con frustración, aludiendo a la vigilancia y la autocensura que percibe en la sociedad.
Recordando la noche de las elecciones, Bateman compartió que sintió un alivio físico al ver cómo los estados se teñían de rojo. “No me di cuenta de lo incómodos que habían sido los últimos cuatro años hasta que sentí que ese globo se desinflaba”, reflexionó. Para ella, no se trata de un partido o una persona como héroe, sino de la libertad de expresar pensamientos propios.
La actriz, que ha mantenido una carrera activa en la industria del entretenimiento, también ha reflexionado sobre la evolución de su vida y su deseo de que las nuevas generaciones puedan expresar sus opiniones sin miedo. “Los padres deben decirles a sus hijos que vivan libremente, pero sin infringir la libertad de los demás”, enfatizó.
Bateman ha estado involucrada en diversos proyectos, desde su participación en “Desperate Housewives” hasta su trabajo como directora en películas independientes. Además, ha escrito sobre su experiencia como una “mujer anteriormente famosa” y ha abordado la belleza de envejecer en sus obras. “Para mí, hay dos edades: estar vivo o muerto”, afirmó en una charla reciente.
Con una visión clara sobre la industria del entretenimiento, Bateman se distancia de la polarización política, afirmando que su amor por el arte y por las personas en la industria trasciende las elecciones. “No me importa cómo votaron”, concluyó, dejando claro que su enfoque está en el carácter de las personas, no en sus preferencias políticas.