La amistad entre ambas se forjó en el contexto de la industria musical, donde ambas enfrentaron desafíos similares. Cher recuerda un día en el que Tina llegó a su habitación antes de una grabación, solicitando un corrector para ocultar un moretón en su brazo. *“Ella no quería que se viera en cámara,”* escribió Cher, quien rápidamente le ofreció lo que necesitaba. En esa conversación, Turner también le preguntó cómo había logrado dejar a su primer esposo, Sonny Bono, con quien estuvo casada de 1969 a 1975.
La respuesta de Cher fue directa: *“Simplemente salí y seguí adelante.”* Este intercambio evocó en Cher su propia experiencia, cuando buscó el consejo de Lucille Ball para dejar a Bono, quien también había sido un compañero complicado. *“Le dije, Lucy, quiero dejar a Sonny y tú eres la única que ha estado en esta situación. ¿Qué debo hacer?”* recordó Cher, destacando la conexión entre sus historias.
La relación entre Cher y Tina se remonta a su primera colaboración en el programa Sonny and Cher en 1972, donde ambas brillaron en el escenario. Cher también rememoró su última visita a Tina en Suiza, describiéndola como un momento lleno de risas, a pesar de los problemas de salud que enfrentaba Turner. *“Ella solo necesitaba hablar y gritar,”* compartió Cher, reflejando la esencia de su amistad.
A lo largo de sus carreras, ambas artistas enfrentaron relaciones difíciles. Tina, quien había sido víctima de violencia doméstica por parte de Ike, vivió años de sufrimiento que incluyeron lesiones físicas y psicológicas. En su autobiografía, Turner describe cómo intentó mantener su cordura mientras lidiaba con la locura de Ike, incluso llegando a intentar suicidarse en 1968.
Sin embargo, la vida de Tina dio un giro significativo con el lanzamiento de su álbum *Private Dancer* en 1984, cuando tenía 45 años. Este éxito marcó el inicio de una nueva etapa en su vida, que incluyó giras agotadoras y un amor renovado con el ejecutivo musical Erwin Bach, con quien se casó en 2013.
En una entrevista de 2008 con Oprah Winfrey, Cher recordó su primera impresión de Tina, quien llegó al estudio con un estilo elegante y una actitud serena. *“Tina es tan gentil, y yo tengo una boca de marinero,”* comentó Cher, resaltando las diferencias en sus personalidades. A pesar de estas diferencias, su conexión fue innegable, y su colaboración en el escenario siempre fue un espectáculo memorable.
La historia de Cher y Tina es un testimonio de la resiliencia y la amistad en medio de la adversidad, un legado que perdurará en la memoria de sus seguidores.