Esta vez, el foco se centra en un nombre familiar en el panorama digital mexicano: Memo Aponte. Dos ex parejas, Mónica Rosales y Shaddia Haddad, decidieron romper el silencio en una entrevista en el podcast "Un Tal Fredo", revelando detalles perturbadores sobre su relación con el popular youtuber. Sus testimonios, lejos de ser una simple discusión, pintan un panorama de abuso psicológico, manipulación y violencia, dejando al descubierto una faceta muy distinta a la imagen pública del influencer.
Rosales, quien fuera presentada por Aponte como su "princesa Rapunzel" en sus videos, describe un patrón de control y manipulación que incluía amenazas de suicidio. "Me regresaba corriendo a la casa y ya había una cuerda, una silla, todo el escenario de ‘me voy a desvivir’", recordó conmocionada. Además, menciona la existencia de un contrato de confidencialidad que le impide revelar la totalidad de los hechos, un obstáculo legal que está intentando superar con ayuda de sus abogados. La presión ejercida por Aponte para controlar sus interacciones familiares también forma parte de su relato.
Por su parte, Haddad detalla un escenario similar, añadiendo acusaciones de maltrato animal. Su testimonio incluye episodios de violencia física hacia las mascotas de Aponte, llegando incluso a "drogaba a sus perros. Les da gotas de marihuana". La entrevista también revela escenas de humillación y menosprecio, con Aponte comparándola constantemente con sus ex parejas, enfocándose en su apariencia física. La experiencia descrita por Haddad de tener que limpiar las necesidades fisiológicas de Aponte en la cama, resalta la degradación y el abuso al que se vio sometida.
Las redes sociales han explotado con reacciones a las declaraciones de ambas mujeres. Miles de usuarios han expresado su indignación y repudio ante las acusaciones, algunos pidiendo una investigación formal por parte de las autoridades. La indignación generalizada se ha expresado a través de cientos de comentarios en plataformas como X (antes Twitter), reflejando la creciente preocupación social sobre la violencia de género y el abuso de poder en las relaciones interpersonales.
El impacto de estas revelaciones va más allá de la esfera digital. Se trata de un reflejo de la importancia de dar voz a las víctimas y de cuestionar las narrativas cuidadosamente construidas que a menudo se presentan en las redes sociales. La historia de Memo Aponte, un influencer con una gran audiencia, sirve como un recordatorio de la necesidad de un análisis crítico de las imágenes que consumimos en línea.