Pero a veces, las historias más fascinantes se esconden entre los acordes, en los silencios entre notas.
Javier Bátiz, un nombre que evoca Tijuana, el olor a mar y el sonido rebelde del rock. Este guitarrista, considerado un pionero del género en México, dejó una marca imborrable en la historia musical. Su vida, sin embargo, no se limita a sus composiciones; está entrelazada con las de otras figuras icónicas. Una historia en particular, recientemente retomada, ha generado gran interés: su relación con Carlos Santana.
En una entrevista con el youtuber Javier Paniagua, realizada poco antes de su fallecimiento, Bátiz reveló detalles sorprendentes sobre sus primeros encuentros con el legendario guitarrista jalisciense. Según Bátiz, "Su mamá me vio tocar en el parque y fue por su hijo, lo llevó. Le dije ‘Déjemelo señora’, porque era un niño, ha de haber tenido 8 o 9 años. Yo le llevo 4 años, yo tenía 14. Le enseñé a tocar".
La anécdota, lejos de ser una simple clase de guitarra, describe una conexión profunda. La insistencia de la madre de Santana, según el relato de Bátiz, refleja la temprana pasión del joven Carlos. "Al día siguiente, me dijo ‘Por su culpa mi hijo no durmió’", recordó Bátiz con una sonrisa nostálgica.
Pero la historia no termina ahí. Bátiz describe una amistad infantil forjada entre clases de guitarra y juegos: "Nos juntábamos a tocar diario. A las 2-3 de la tarde ya estaba aquí en la casa y hasta las 9 o 10 de la noche se iba, en el inter tocábamos y cuando nos cansábamos nos poníamos a armar carritos. La pasábamos bien suave, como éramos niños… Pienso que aún somos niños Carlos y yo, somos diferentes a otros músicos y otras gentes. Cuando nos vemos, somos iguales,"
Este relato íntimo revela una faceta desconocida de la vida de ambos músicos. Más allá de Santana, la vida de Javier Bátiz se entrelazó con otros grandes nombres de la música, incluyendo a Jim Morrison de The Doors. Un legado musical y personal que trasciende generaciones.
La influencia de Bátiz se extiende más allá de su propia obra, tejiendo una red de conexiones que enriquecen la historia del rock en México y en el mundo. Su vida, un testimonio del poder de la amistad, la pasión y el talento innato.