‘Kraven the Hunter’: El fracaso taquillero que sacude a Sony y Marvel
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Nicol Matuz Scott
El foco está puesto en Kraven the Hunter, la apuesta de Sony dentro del universo Marvel, protagonizada por Aaron Taylor-Johnson y Russell Crowe. La película, estrenada tras varios retrasos –debidos, en parte, a las huelgas de Hollywood de 2023–, ha generado un revuelo, pero no el esperado.
Las críticas, en su mayoría desfavorables, incluyendo la calificada como "abismal" por The Independent, parecen haber impactado significativamente en la asistencia a las salas de cine. Y es que Kraven the Hunter ha roto un récord, aunque no el que Sony deseaba: se convirtió en el estreno con el peor fin de semana de taquilla para una película de Marvel producida por la compañía.
Las cifras hablan por sí solas: sólo recaudó $11 millones de dólares en Estados Unidos y $15 millones a nivel global durante su primer fin de semana. Una cifra lamentable considerando su presupuesto, estimado entre $110 y $150 millones de dólares. Esta recaudación total de $26 millones palidece en comparación con otras producciones del mismo universo.
Para poner en perspectiva el magro resultado, la película se queda muy por detrás de Morbius, otra producción de Sony que, a pesar de sus críticas negativas, logró recaudar $39 millones en su estreno. Incluso Madame Web, a pesar de no ser un éxito de crítica, recuperó la mitad de su presupuesto en su primer fin de semana, alcanzando los $49.1 millones de dólares.
El contraste es aún más marcado si lo comparamos con la exitosa franquicia de Venom, la cual generó cientos de millones de dólares en sus tres entregas. A diferencia de Kraven, Venom se convirtió en un éxito inesperado en 2018, marcando un precedente que, lamentablemente, no se repitió con la más reciente producción.
Mientras tanto, películas como Inside Out 2 y Deadpool & Wolverine superaron la marca de los mil millones de dólares en taquilla este año. Este contraste acentúa aún más el fracaso de Kraven the Hunter dentro del panorama cinematográfico actual. Queda la interrogante: ¿Qué lecciones aprenderá la industria del resultado de esta megaproducción?
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