Wicked: Part One, la adaptación cinematográfica del aclamado musical de Broadway, protagonizada por las talentosísimas Ariana Grande como 'Glinda' y Cynthia Erivo como 'Elphaba', tuvo su estreno en cines el 22 de noviembre.
Dirigida por Jon M. Chu, la película, con una duración de 2 horas y 40 minutos y clasificación PG, ya está causando sensación. La decisión de dividir la historia en dos partes, según el propio Chu, fue necesaria para “evitarle daños a la historia original”, como explicó en una publicación en X en 2022. La segunda parte se espera para el 21 de noviembre de 2025.
Pero, ¿cuándo podremos disfrutarla desde la comodidad del hogar? La noticia llegó como un regalo navideño anticipado: a partir del 31 de diciembre, Wicked: Part One estará disponible para renta o compra a través de plataformas de video bajo demanda como Amazon Prime Video, Apple TV+, YouTube y FandangoNOW.
Aún no hay fecha confirmada para su llegada a plataformas de streaming, aunque se especula que Peacock (el servicio de streaming de NBCUniversal) sea el destino final, considerando el historial de lanzamientos de Universal Pictures, con plazos que oscilan entre 45 y 120 días después del estreno en cines. Películas como Twisters llegaron a la plataforma en cuatro meses, mientras que Fall Guy y Kung Fu Panda 4 lo hicieron en aproximadamente tres.
La historia, fiel al espíritu del musical, presenta la relación entre Glinda y Elphaba, desde su encuentro en la Universidad Shiz hasta sus divergentes caminos, influenciados por el Mago de Oz (interpretado por Jeff Goldblum). La película, según palabras del director, ofrece “una interpretación mucho más profunda” que la versión teatral, gracias a la intimidad que permite la cámara.
El elenco, que incluye a Jonathan Bailey como Fiyero y Marissa Bode (la primera actriz en silla de ruedas en interpretar a Nessarose), ha expresado su profundo compromiso con el proyecto. Grande ha confesado que la experiencia “la cambió para siempre”, mientras que Erivo admite la dificultad de despedirse de su personaje, reconociendo el significado histórico de su interpretación para la representación de mujeres en el universo de Oz. Bode, por su parte, aprovechó su papel para visibilizar la comunidad con discapacidad.