La actriz, conocida por su papel en Euphoria, y quien recientemente brilló en la entrega de los premios Gotham, compartió con la revista W anécdotas de su juventud. Entre ellas, una experiencia que, a sus 13 años, la dejó profundamente afectada: su asistencia a un concierto de Beyoncé.
“Tenía un póster de Beyoncé en mi pared porque fui a su concierto por mi cumpleaños número 13”, reveló la actriz. Sin embargo, el evento no transcurrió exactamente como ella lo había imaginado. "Quedé devastada porque no me cantó 'Feliz Cumpleaños'. Supongo que estaba cerca de su cumpleaños y cantaba para la audiencia", confesó Zendaya. La situación fue aún más desafortunada, pues su padre le ofreció subirla a sus hombros para que Beyoncé la viera, pero la joven, avergonzada, rechazó la propuesta. "Después, pensé: '¡Maldita sea!, debí dejar que mi papá me subiera a sus hombros para que ella me viera'", añadió con una sonrisa irónica.
Más allá de este episodio con la Reina Bey, la entrevista también arrojó luz sobre otro suceso que aún la marcó profundamente: su participación en la temporada 16 de Dancing With the Stars. A sus 16 años, Zendaya y su compañero de baile, Val Chmerkovskiy, quedaron en segundo lugar, una experiencia que, según ella misma admite, le dejó una huella significativa.
“Sentí esa derrota profundamente. Solo tenía 16 años, y era extremadamente estresante. Estar en televisión en vivo cada semana... es aterrador. Me lo tomé muy en serio, lo cual, en retrospectiva, desearía no haber hecho. Ojalá lo hubiera disfrutado un poco más y simplemente hubiera dicho: 'Bueno, qué más da'. ¿Sabes a qué me refiero? Pero me estaba estresando mucho. Realmente lo pasé mal en ese entonces”, explicó con honestidad.
Estos momentos, aunque dolorosos en su momento, reflejan la madurez y la perspectiva actual de una artista que ha transitado con éxito un camino plagado de desafíos y triunfos. Su capacidad de reírse de las situaciones pasadas, nos permite conocer a una Zendaya más auténtica y cercana.