Lindsay Lohan, una figura conocida en la industria del entretenimiento, ha experimentado una notable evolución en su apariencia. Si comparamos fotos de años anteriores con sus apariciones más recientes, la diferencia es innegable. Pero, ¿qué hay detrás de este cambio?
Diversos especialistas en medicina estética han analizado el caso. "Se aprecia una piel más saludable y homogénea en color," comentan las doctoras Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto de la Clínica Mira+Cueto, destacando la diferencia con imágenes de la década de 2010, donde se observa una piel "sobretratada, hinchada, con ojeras marcadas y contornos poco definidos."
Las especialistas explican que la actriz ha optado por una estrategia más natural. "Está claro que vamos hacia la naturalidad. La finalidad es mantener la frescura de nuestros rostros sin cambiar ni perder la identidad, proporción, armonía ni tampoco la esencia," afirman las doctoras Mira y Ruiz del Cueto.
Entre los procedimientos mencionados, se incluyen:
- Blefaroplastia (cirugía de párpados): Para corregir la caída de los párpados.
- Lifting endoscópico de cejas: Para elevar y tensar las cejas.
- Bioestimuladores de colágeno: Para revitalizar la piel y mejorar su textura.
- Tratamientos con láser: Para mejorar la luminosidad y textura de la piel.
- Eliminación de ácido hialurónico con hialuronidasa: Para corregir posibles excesos de relleno.
- Ultherapy: Un procedimiento de ultrasonido enfocado para levantar y tensar la piel.
- Ácido hialurónico y neuromoduladores: Para rellenar y suavizar arrugas.
La transformación de Lindsay Lohan ilumina la evolución de las técnicas de medicina estética, que buscan resultados naturales y armónicos, complementando un estilo de vida saludable.