La atmósfera, palpable incluso a través de la pantalla, sugería una historia llena de giros inesperados, de secretos guardados durante años.
Finalmente, se reveló la identidad del enigmático invitado: Pablo Ruíz, el aclamado cantante argentino. Su trayectoria, marcada por éxitos musicales, daba pie a pensar en una conversación centrada en su carrera. Sin embargo, la charla tomó un rumbo mucho más personal e íntimo.
Ruíz confesó las presiones que sufrió durante sus inicios. "Me inventaban romances con chicas porque los mánagers me decían que tenía que ser más masculino," reveló, describiendo cómo la industria musical lo presionó a ocultar su verdadera orientación sexual para mantener su popularidad. Esta presión, según contó, lo llevó a experimentar relaciones íntimas con mujeres, una situación que calificó como incómoda y ajena a sus deseos.
"Hasta los diecisiete estuve con chicas... fueron todas fans," admitió, detallando su primera experiencia con una mujer mayor en Nicaragua. "Fue raro, me gustó, pero no era 'wow'," explicó, dejando entrever la disonancia entre su realidad y la imagen pública que se le imponía.
Pero la revelación más sorprendente llegó más adelante. La conversación derivó en la figura de Ricky Martin. Tras mencionar a otros artistas que también enfrentaron la necesidad de ocultar su sexualidad, Yordi Rosado no pudo resistir la pregunta sobre una posible relación entre Pablo y el ícono puertorriqueño.
Ruíz confirmó un encuentro memorable: "Fuimos muy amigos. Él me robó mis bailarinas... nos juntamos sus músicos, mis bailarinas y jugábamos 'Verdad o Reto' y en ese momento salió una prueba con él, en donde le di un beso y nos dimos 'un piquito'." Describió la experiencia como un momento fugaz, pero significativo, que dejó una huella en su vida. La anécdota, contada con una mezcla de nostalgia y sinceridad, dejó a la audiencia con la intriga de saber más sobre la naturaleza de su relación.
La entrevista dejó claro el alto costo personal que conlleva la presión de la industria musical y la importancia de la autenticidad. La valentía de Pablo Ruíz al compartir su historia sin duda resonará con muchos.