Santana: La noche mágica de los Grammy 2000
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Yelitza EspinozaHablamos de la 42ª entrega anual de los premios Grammy, una gala que tuvo como protagonista indiscutible a Carlos Santana y su álbum "Supernatural". Aunque el guitarrista mexicano aseguraba no tener expectativas, “solo apertura para manifestar bendiciones y milagros,” la realidad superó cualquier pronóstico.
El disco, impulsado por éxitos rotundos como "Smooth" (con Rob Thomas) y "Maria Maria" (con The Product G&B), estaba destinado a hacer historia. Y así lo hizo, igualando el récord de Michael Jackson con "Thriller" al obtener ocho premios Grammy en una sola noche. Un triunfo que se extendió a nueve galardones, considerando el triunfo por "Álbum del Año", compartiendo el récord del álbum más premiado con "How to Dismantle an Atomic Bomb" de U2.
La victoria fue aún más significativa para Santana, quien solo había ganado un Grammy en sus tres nominaciones previas. “Fue una verdadera validación”, recuerda el músico, “pensaba en ese niño de México que solo quería tocar con Michael Bloomfield y Jerry Garcia.”
La noche comenzó con un preámbulo de éxitos en la ceremonia previa a la transmisión televisiva, donde Santana se llevó seis premios: Mejor Álbum de Rock, Mejor Interpretación Instrumental de Rock ("The Calling"), Mejor Interpretación de Rock por un Dúo o Grupo con Vocal ("Put Your Lights On"), Mejor Colaboración Pop con Vocal ("Smooth"), Mejor Interpretación Pop por un Dúo o Grupo con Vocal y Mejor Interpretación Instrumental Pop ("El Farol"). Este último premio fue especialmente emotivo para Santana:
- “Mi hijo Salvador y yo lo escribimos para mi padre José Santana, un increíble músico e inspiración para mí,” explicó Santana, “había fallecido recientemente. Fue extremadamente gratificante honrarlo de esa manera.”
La culminación de la noche llegó con la presentación de Santana y Thomas interpretando "Smooth", una actuación que se reservó para el final, después de que Britney Spears, nominada a Mejor Artista Nuevo, presentara sus exitosos temas. Finalmente, Bob Dylan y Lauryn Hill entregaron el premio final: Álbum del Año, que consagró definitivamente la noche mágica de Carlos Santana.
Una noche inolvidable que, 25 años después, sigue inspirando a nuevas generaciones de músicos.
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