Alejandro Ibarra: Regreso triunfal tras batallas personales

A veces, estos retos nos muestran la verdadera fortaleza del espíritu humano y la capacidad de resiliencia.
Alejandro Ibarra, hijo de las reconocidas figuras Julissa y Benny Ibarra, ha vuelto a los reflectores. Su reaparición en el mundo de la actuación, como parte del elenco de la telenovela Monteverde (estreno junio 2025), ha generado gran expectación. Pero su regreso no está exento de un contexto personal complejo que ha marcado su vida en los últimos años.
Ibarra ha hablado abiertamente sobre su lucha contra la disfonía espasmódica, una afección neurológica que afecta sus cuerdas vocales. “Es una enfermedad incurable, que no me va a quitar la vida, pero sí afecta mi día a día”, declaró en una reciente entrevista. El actor detalló cómo ha aprendido a lidiar con esta condición, que le provoca días buenos y días malos en cuanto a su capacidad vocal. “Me inyectan bótox, y eso ayuda un poco, pero siempre está ahí”, agregó.
Este desafío de salud se suma a otros retos personales que ha enfrentado. Recientemente, Ibarra se vio involucrado en una disputa legal con su expareja, Mar, quien lo acusó de despojo y violencia de género, además de impedirle el acceso a sus hijos. Con el apoyo incondicional de su madre, Julissa, finalmente llegaron a un acuerdo, priorizando siempre el bienestar de sus hijos.
Su regreso a la actuación en Monteverde representa una nueva etapa, un triunfo sobre la adversidad. Un ejemplo de cómo la perseverancia y el apoyo familiar pueden ser fundamentales para superar las dificultades, tanto en el ámbito personal como profesional. Ibarra demuestra que, aún enfrentando enfermedades crónicas y procesos legales complejos, es posible seguir adelante, redefinir el éxito y encontrar la fuerza para continuar creciendo.
La preparación para Monteverde, requirió de una planificación cuidadosa y un gran compromiso. “Agarrándole la onda, ¿no?, los llevo en la mañana, me vengo para acá, si puedo voy por ellos, si no me echan la mano, pues buscándole día a día. No sabemos los llamados, entonces tengo llamado temprano, los llevo temprano, me vengo para acá, o si de plano es muy temprano, pues alguien va por ellos, ahí le estoy agarrando apenas la onda”, explicó sobre la logística diaria con sus hijos, mientras se enfrenta a los retos de su carrera.