Fue en el Teatro Metropólitan donde Aleks Syntek soltó la bomba: "Ayer me invitó Maxine Woodside a grabar una entrevista y ella me grabó a escondidas para ver qué me sacaba de lo de Shakira". La revelación dejó claro que el músico no estaba dispuesto a tolerar lo que consideró una falta de ética periodística.
Los detalles del conflicto se remontan a semanas atrás, cuando Syntek compartió una anécdota incómoda sobre un encuentro con Shakira:
- La colombiana lo halagó frente a su esposa con un "Qué guapo, ¿qué te hiciste, Alex? Te ves bien chavo".
- El tono coqueto, según él, generó incomodidad.
- Las redes lo acusaron de inventar historias, comparándolo incluso con Martha Higareda.
Pero lo que realmente encendió la mecha fue la acusación contra
Maxine Woodside. Según el cantante, la conductora de
Todo para la mujer habría usado tácticas cuestionables para obtener declaraciones sobre el polémico episodio.
"La verdad es que ya estoy hasta la madre", sentenció ante los gritos de apoyo del público.
La advertencia final no dejó lugar a dudas: Aleks Syntek anunció que seguirá el ejemplo de Luis Miguel y dejará de dar entrevistas. "Perdónenme, pero ya no voy a dar entrevistas ni en podcast", declaró entre aplausos, aunque con una sonrisa que dejaba entrever cierta ironía.
Mientras Maxine Woodside mantiene silencio, las redes se dividen:
- Unos defienden al artista y critican los métodos sensacionalistas.
- Otros ironizan sobre su historial de declaraciones polémicas.
Lo cierto es que el conflicto ha puesto sobre la mesa un debate recurrente:
¿hasta dónde pueden llegar los medios para obtener exclusivas? Por ahora, Syntek parece haber tomado una decisión radical, aunque el tiempo dirá si es definitiva.
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