Ben Stiller confiesa sus mayores arrepentimientos como padre en documental

Durante la grabación de su documental "Stiller & Meara: Nothing Is Lost", dedicado a la vida de sus padres, el comediante Jerry Stiller y la actriz Anne Meara, Ben reveló un episodio familiar que marcó su relación con su hija Ella Olivia Stiller, hoy de 23 años. "Probablemente fue la peor decisión de mi vida", admitió frente a las cámaras, refiriéndose a cuando la dejó fuera del montaje final de "The Secret Life of Walter Mitty" (2013), película que él mismo dirigió.
La escena eliminada mostraba a Ella interpretando de niña a Odessa Mitty, hermana del personaje principal. Aunque su hija restó importancia al hecho —"no tenía sentido en la película"—, para Stiller el asunto trascendía lo cinematográfico: "Tiene que ver con mis propios demonios, esa obsesión por el trabajo y el perfeccionismo que heredé de mi padre".
Pero las revelaciones no terminaron ahí. En una entrevista paralela con The Times, el protagonista de "Zoolander" fue más allá:
El documental, que explora la compleja dinámica entre Jerry y Anne como pareja artística y parental, parece haber sido el catalizador para que Ben enfrentara sus propias contradicciones. "Vi todo el estrés y la tensión de mis padres trabajando juntos, y juré no ser así", confesó. La ironía, según él, es que terminó repitiendo la historia con sus hijos.
Mientras el material se prepara para su estreno, las confesiones de Stiller resuenan como un recordatorio de que incluso las estrellas más brillantes tienen sombras familiares. Sin dramatismos, pero con honestidad cruda, el actor demostró que a veces las cámaras capturan más de lo que uno pretende mostrar.