Francisco receta ‘cariñoterapia’ para niños

Cd. de México.
Las sonrisas prevalecieron entre los pequeños pacientes que son atendidos en el Hospital Infantil de México.
Las sonrisas prevalecieron entre los pequeños pacientes que son atendidos en el Hospital Infantil de México: Bendiciones, relicarios, selfies, saludos… el papa Francisco brindó un momento de tranquilidad espiritual a estos menores y sus familiares.
Y unas palabras de aliento…
“Agradezco a Dios la oportunidad de poder venir a visitarlos en este hospital”, señaló.
El Sumo Pontífice dijo que “hay un pedacito en el Evangelio que nos cuenta la vida de Jesús cuando era niño”.
Les recordó: “Jesús era bien pequeñito. Un día los papás José y María lo llevaron al Templo para presentárselo a Dios”.
Y agregó:
“Así se encuentran con un anciano llamado Simeón que lo toma en brazos y bendice a Dios”.
“Ver al niño Jesús provocó en él dos cosas: sentimiento de agradecimiento y ganas de bendecir”.
El Papa indicó que “Simeón es el ‘abuelo’ que nos enseña esas dos actitudes fundamentales: la de agradecer y bendecir”.
Dijo que en el Hospital Infantil de México -y no sólo por la edad- “me siento muy cercano a estas dos enseñanzas de Simeón”.
Confesó que al momento de cruzar la puerta del hospital y “ver sus ojos, sonrisas, rostros generó ganas de dar gracias”.